Estado de México.- El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de las Industrias del Autotransporte de Pasajeros de Carga en General (CTC), José Gutiérrez Mendoza, lamentó que impere la desconfianza sobre la actuación de la autoridad al momento de interponer las denuncias.
El líder dijo saber de la importancia de actuar en contra de la delincuencia de que es objeto el transportista, pero lamentó el que se haya caído en la simulación "porque las mismas autoridades y choferes de Cuautitlán ya saben quiénes son los delincuentes, pero no los denuncian por temor".
Por ello, consideró que los operadores del transporte público del valle de México se encuentran indefensos ante la inseguridad.
El representante laboral enfatizó que la desconfianza es tal que únicamente se denuncia el 50 por ciento de los delitos que se cometen en el transporte público, cifra que a pesar de todo es superior a la registrada en el mismo periodo del año anterior.
Para el líder es evidente el maltrato de los funcionarios públicos de la Procuraduría mexiquense al momento de interponer una denuncia, situación que desalienta a los operadores que hayan sido objeto de algún asalto.
Actualmente, la dilación al momento de poner una denuncia se ha reducido porque anteriormente tardaban por lo menos 12 horas, y en estos momentos se ha agilizado el trámite y pueden ser dos o tres horas la tardanza.
Gutiérrez Mendoza puntualizó que no es fácil establecer el monto sobre las pérdidas económicas que se generan con un asalto, pero son sustanciales y no sólo la empresa, sino que todos pierden.
El chofer no tiene un salario asignado, entonces cuando es asaltado, no sólo es el dueño de la unidad el perjudicado, sino la familia del operador, ya que no contará con ese ingreso del día.
El líder dijo saber de la importancia de actuar en contra de la delincuencia de que es objeto el transportista, pero lamentó el que se haya caído en la simulación "porque las mismas autoridades y choferes de Cuautitlán ya saben quiénes son los delincuentes, pero no los denuncian por temor".
Por ello, consideró que los operadores del transporte público del valle de México se encuentran indefensos ante la inseguridad.
El representante laboral enfatizó que la desconfianza es tal que únicamente se denuncia el 50 por ciento de los delitos que se cometen en el transporte público, cifra que a pesar de todo es superior a la registrada en el mismo periodo del año anterior.
Para el líder es evidente el maltrato de los funcionarios públicos de la Procuraduría mexiquense al momento de interponer una denuncia, situación que desalienta a los operadores que hayan sido objeto de algún asalto.
Actualmente, la dilación al momento de poner una denuncia se ha reducido porque anteriormente tardaban por lo menos 12 horas, y en estos momentos se ha agilizado el trámite y pueden ser dos o tres horas la tardanza.
Gutiérrez Mendoza puntualizó que no es fácil establecer el monto sobre las pérdidas económicas que se generan con un asalto, pero son sustanciales y no sólo la empresa, sino que todos pierden.
El chofer no tiene un salario asignado, entonces cuando es asaltado, no sólo es el dueño de la unidad el perjudicado, sino la familia del operador, ya que no contará con ese ingreso del día.
El Sol de Toluca
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