Estado de México.- La reforma constitucional de junio de 2011 en materia de derechos humanos, rompió paradigmas que se tenían en el sistema jurídico mexicano, al armonizar leyes nacionales con tratados y convenciones internacionales, señaló Baruch Delgado Carbajal, presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México.
Al participar como panelista en la celebración del 30 aniversario del egreso de la generación 80-85 de la facultad de Derecho de la Máxima Casa de Estudios, junto con destacados juristas como Tonatiuh Galindo Enciso, José Vera Monroy, Juan Carlos Vázquez Libién y Carlos Bernardo González Sandoval, el ombudsman mexiquense resaltó en su disertación, el cambio de criterio y concepción del sistema de leyes en el país.
Delgado Carbajal indicó que los retos que aún existen con la reforma constitucional, es avanzar en su interpretación y alcances para la protección de los derechos fundamentales de las personas.
Por su parte, Tonatiuh Galindo Enciso coincidió en la ruptura de paradigmas, al considerar que la reforma abre de manera importante el espectro de la protección de la constitucionalidad a los derechos humanos.
Sin embargo, explicó que el reto es lograr un equilibrio entre libertad y autoridad, lo cual permitirá una convivencia civilizada que no es otra cosa que la aspiración y justificación del estado.
En su oportunidad, José Vera Monroy se refirió a los cambios en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, con la entrada en vigor de la reforma constitucional de derechos humanos, argumentando que los policías también cuentan con derechos y no sólo obligaciones frente a sus actividades con la sociedad.
Aseveró que se dejó fuera esa cuestión, lo cual es violatorio de las prerrogativas de los uniformados, pues no existe un modelo que les de seguridad y tranquilidad para servir a la sociedad.
En tanto, Juan Carlos Vázquez Libién añadió que la reforma de derechos humanos respecto de la jurisprudencia en la corte, ha tenido dos sesgos en favor de los ciudadanos, pues ha sido reformadora de las normas y deja mayor libertad a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver los conflictos interestatales.
Carlos Bernardo González Sandoval, quien fungió como moderador del panel, concluyó que lo más importante es que los derechos humanos son parte fundamental del derecho internacional y deben ser tomados en consideración desde ese ámbito; además de lo que ordena la constitución, apegarse a los tratados y convenciones internacionales.
Al participar como panelista en la celebración del 30 aniversario del egreso de la generación 80-85 de la facultad de Derecho de la Máxima Casa de Estudios, junto con destacados juristas como Tonatiuh Galindo Enciso, José Vera Monroy, Juan Carlos Vázquez Libién y Carlos Bernardo González Sandoval, el ombudsman mexiquense resaltó en su disertación, el cambio de criterio y concepción del sistema de leyes en el país.
Delgado Carbajal indicó que los retos que aún existen con la reforma constitucional, es avanzar en su interpretación y alcances para la protección de los derechos fundamentales de las personas.
Por su parte, Tonatiuh Galindo Enciso coincidió en la ruptura de paradigmas, al considerar que la reforma abre de manera importante el espectro de la protección de la constitucionalidad a los derechos humanos.
Sin embargo, explicó que el reto es lograr un equilibrio entre libertad y autoridad, lo cual permitirá una convivencia civilizada que no es otra cosa que la aspiración y justificación del estado.
En su oportunidad, José Vera Monroy se refirió a los cambios en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, con la entrada en vigor de la reforma constitucional de derechos humanos, argumentando que los policías también cuentan con derechos y no sólo obligaciones frente a sus actividades con la sociedad.
Aseveró que se dejó fuera esa cuestión, lo cual es violatorio de las prerrogativas de los uniformados, pues no existe un modelo que les de seguridad y tranquilidad para servir a la sociedad.
En tanto, Juan Carlos Vázquez Libién añadió que la reforma de derechos humanos respecto de la jurisprudencia en la corte, ha tenido dos sesgos en favor de los ciudadanos, pues ha sido reformadora de las normas y deja mayor libertad a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver los conflictos interestatales.
Carlos Bernardo González Sandoval, quien fungió como moderador del panel, concluyó que lo más importante es que los derechos humanos son parte fundamental del derecho internacional y deben ser tomados en consideración desde ese ámbito; además de lo que ordena la constitución, apegarse a los tratados y convenciones internacionales.
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