Texcoco, Estado de México.- A 76 años de su construcción, la calle del Trabajo de la colonia El Cooperativo Chapingo fue rehabilitada por el Movimiento Antorchista de Texcoco.
Ofelia García Flores quien habita en El Cooperativo, desde 1940, vio como el paso del tiempo deterioró su calle, afectó los servicios de agua y drenaje y posteriormente el piso de concreto.
Ella habita en una de las viviendas que aún conservan el diseño original creado en 1935 por el afamado muralista mexicano Diego Rivera, quien construyó la fuente que yace al centro de la comunidad y que de acuerdo con los datos históricos refleja los valores cooperativistas del pueblo trabajador.
Ofelia recuerda que El Cooperativo era una comunidad organizada, tranquila y singular “todos los vecinos nos conocíamos muy bien, organizábamos posadas y otras actividades culturales. Cuando El Cooperativo se vendió también se vino abajo la infraestructura y con ello el deterioro de nuestras calles. Afortunadamente, el Movimiento Antorchista nos ayudó con la reparación”.
Otros beneficiados fueron los alumnos del Jardín de Niños “Sor Juana Inés de la Cruz”, donde fue edificada una techumbre que permite a 180 alumnos realizar sus actividades al aire libre sin exponerse a las inclemencias del tiempo, indicó la directora del plantel, María de la Luz González García.
Ambas ciudadanas reconocieron que el gobierno municipal ha hecho “poco” por el mejoramiento de la colonia, motivo por el cual solicitaron al líder del Movimiento Antorchista en Texcoco, Brasil Acosta, su ayuda para realizar más gestiones a favor de esta comunidad.
Un dato curioso acerca de esta comunidad es que se trata del primer pueblo cooperativo de México donde no existían bares ni cantinas, tampoco se construyeron templos, ya que el pensamiento cooperativista estaba fundamentado en la unidad y en obtener resultados de acuerdo a sus propios esfuerzos.
Ofelia García Flores quien habita en El Cooperativo, desde 1940, vio como el paso del tiempo deterioró su calle, afectó los servicios de agua y drenaje y posteriormente el piso de concreto.
Ella habita en una de las viviendas que aún conservan el diseño original creado en 1935 por el afamado muralista mexicano Diego Rivera, quien construyó la fuente que yace al centro de la comunidad y que de acuerdo con los datos históricos refleja los valores cooperativistas del pueblo trabajador.
Ofelia recuerda que El Cooperativo era una comunidad organizada, tranquila y singular “todos los vecinos nos conocíamos muy bien, organizábamos posadas y otras actividades culturales. Cuando El Cooperativo se vendió también se vino abajo la infraestructura y con ello el deterioro de nuestras calles. Afortunadamente, el Movimiento Antorchista nos ayudó con la reparación”.
Otros beneficiados fueron los alumnos del Jardín de Niños “Sor Juana Inés de la Cruz”, donde fue edificada una techumbre que permite a 180 alumnos realizar sus actividades al aire libre sin exponerse a las inclemencias del tiempo, indicó la directora del plantel, María de la Luz González García.
Ambas ciudadanas reconocieron que el gobierno municipal ha hecho “poco” por el mejoramiento de la colonia, motivo por el cual solicitaron al líder del Movimiento Antorchista en Texcoco, Brasil Acosta, su ayuda para realizar más gestiones a favor de esta comunidad.
Un dato curioso acerca de esta comunidad es que se trata del primer pueblo cooperativo de México donde no existían bares ni cantinas, tampoco se construyeron templos, ya que el pensamiento cooperativista estaba fundamentado en la unidad y en obtener resultados de acuerdo a sus propios esfuerzos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario