“DELINCUENTES ELECTORALES”
SIN HALCONES, SIN AGUILAS NI TIBURONES
Por: José Calzada
La justicia, bandera de campaña que le sirvió para acceder al poder del Gobierno de Veracruz, paradójicamente parece que se convertirá en el Talón de Aquiles de la corta administración de Miguel Angel Yunes Linares, pues no soportó la tentación del abuso de poder desde la Fiscalía, primero para colocar al titular a modo y luego para instruir “justicia” a diestra y siniestra contra los enemigos políticos, adversarios y quienes se consideran de riesgo para su gobierno. Luego para buscar enemigos ficticios y genera cajas chinas con el ingrediente de la espectacularidad, pero sólo con los enemigos NO con quienes en efecto lucraron políticamente como Yúnete.
En este espacio no se defiende a Fabiola Balmori Durazzo, se analizan los hechos que evidencian a un gobierno que actúa de manera parcial y totalitario en contra de sus adversarios, no así de los verdaderos delincuentes que matan, roban, extorsionan, enlutan y dejan sin patrimonio a muchas familias veracruzanas.
El caso de los ingenieros que fueron detenidos junto con el esposo de la Directora de Servicios Municipales del Ayuntamiento de Veracruz, enjuiciados y satanizados en el acto como “delincuentes electorales” por realizar una faena voluntaria y de solidaridad con los mexicanos en desgracia en algunos estados del país, en un domicilio particular de Medellín de Bravo y sin un solo logotipo, leyenda o color partidista. Es a todas luces un acto de ABUSO DE PODER, no hay otra explicación y sin duda alguna, los veracruzanos condenarán el uso y abuso de la Fiscalía veracruzana más aún cuando los funcionarios de Gobierno que utilizaron los colores de la Alianza PAN-PRD y de manera velada pero subliminal el apellido del gobernador en YUNETE, están libres.
Rafael Jesús Abreu Ponce, Director de la CAEV Coatzacoalcos, Ricardo Cabrera Ferez delegado de Patrimonio del Estado y Mauro Sánchez Pola, Rector de la Universidad Tecnológica del Sureste en Nanchital, todos funcionarios del gobierno del estado que en esa calidad realizaron propaganda política a favor de de la Alianza PAN-PRD con despensas lucrativas en medio de la desgracia en el sur del estado, fueron cesados tras la presión de las redes sociales, pero jamás se observó a la Fiscalía enviar a sus efectivos elementos para detenerlos a pesar de la flagrancia, evidencia y autoría de los hechos que presumían a todas luces un delito electoral.
La diferencia con el caso Balmori es que se trata de ayuda humanitaria aportadas por ciudadanos comunes organizados en el Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas del Estado de Veracruz, el domicilio en que realizaron la tarea no está dentro del municipio donde trabaja la funcionaria, las despensas en bolsas amarillas sin publicidad alguna, serían trasladadas a la Cruz Roja de Veracruz para llevarlas a Oaxaca, Chiapas y el Estado de México, y quien encabezó los trabajos fue detenido fue el propio presidente de esa organización, Juan Antonio Pinilla Rodríguez, por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), a quien acusa de incurrir en un presunto delito electoral.
La ilegal detención no tiene fundamento alguno. En Veracruz no hay procesos electorales, la elección municipal fue el 4 de junio pasado, y los procesos para las cinco elecciones del 2018 aún no comienzan.
El daño colateral es por supuesto para los damnificados que dejarán de recibir esa ayuda por pasiones políticas y de autoritarismo de un gobierno que busca llenar con el abuso de poder los espacios que no puede con el ejercicio sano e imparcial como lo establece la Constitución.
Y no se requiere ser abogado o especialista electoral para determinar quienes sí son delincuentes electorales y quienes son voluntarios, tampoco para ver con toda claridad el uso de la Fiscalía para crear delitos. Pero más allá de la priísta Fabiola Balmori y sus amigos que se organizaron en calidad de sociedad civil para apoyar al pueblo de México en desgracia, el Gobierno del Veracruz ofrece a toda la sociedad la evidencia de su perversidad para convertir en delincuente a quien no comulgue con sus ideas gobierno.
Sí los miembros del Colegio de Ingenieros de Veracruz y la propia Fabiola Balmori son “delincuentes”, que se cuiden todas las asociaciones civiles, incluida la Cruz Roja que mantienen centros de acopio para ayudar a los mexicanos en desgracia, porque son potencialmente sospechosos de ser delincuentes electorales para la Fiscalía General del Estado de Veracruz y podrían ser detenidos en flagrancia como le sucedió a los voluntarios veracruzanos que se unieron para aportar despensas y entregarlas a la Cruza Roja, institución de alta imparcialidad y credibilidad, que a su vez y de acuerdo a sus criterios las entregaría a los damnificados.
Más aún, los detenidos en el periodo del actual fiscal, son todos delincuentes o existen delincuentes creados?.
Los actos ilegales instruidos desde la Fiscalía, se desvanecieron 24 horas después, el Juez Quinto de Distrito ordenó la liberación inmediata de los 7 detenidos por el caso de las despensas en Medellín, pero en una inexplicable actitud, la Fiscalía se negaba a su liberación.
SIN HALCONES, SIN AGUILAS NI TIBURONES
Mientras que en Veracruz los talentos del deporte de alto rendimiento se fugan a otros estados u otros países por la falta de apoyos institucionales, las escuelas infantiles no cuentan con modelos de inspiración para las nuevas generaciones ya que los deportes de primer nivel han desaparecido en la entidad.
En el 2015 desaparecieron los Halcones de la UV de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional con el argumento de que la nómina era de 50 millones de pesos. Este miércoles se dio a conocer la mala noticia de que la directiva de los Rojos del Águila que encabezan José Antonio Mansur Galán y Grimaldo Martínez, anunciaron que la Liga Mexicana no aceptó que el equipo siguiera en Veracruz por las bajas asistencias durante las últimas temporadas, agudizándose en el 2017, se ven en la necesidad de emigrar a Nuevo Laredo, Tamaulipas donde habrán de convertirse en Tecolotes.
Y de los Tiburones Rojos de Veracruz ni qué decir, un equipo que cada temporada festeja el no descenso, como si se tratara de la gran final de la liga, el último partido con los Lobos BUAP, quedó más que claro la calidad del futbol del equipo local con una derrota ante el último lugar de la tabla en la Jornada 9, en realidad el Tiburón busca no dejar de respirar.
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