Destitución de Erwin Castelán, abre esperanza a pobladores
*Conflictos de grupos políticos sumen al municipio en el despilfarro de laudos
*Ex empleados fueron militantes del PRI y se llevan jugosas recompensas
Coacalco, Estado de México.- Con la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de la destitución y consignación del alcalde de Coacalco, Erwin Castelán y del diputado federal David Sánchez Isidoro, ambos políticos del PRI, abre esperanza de que empieza la limpieza en este municipio considerado de alta corrupción e impunidad.
Ambos políticos priistas se presume se escondieron o se dieron a la fuga, y es que nadie sabe dónde se encuentra el alcalde, en tanto el legislador tiene la protección del fuero constitucional; aunque ya no pueden interponer recurso alguno contra el ordenamiento de la SCJN y sólo están a la espera de la notificación y ejecución de la orden de aprehensión.
Este hecho pone a la luz la impunidad y corrupción con que se desempeñaron ambas administraciones, no sólo no respetaron las sentencias anteriores emitidas por instancias judiciales. Sino que ambos grupos en la alternancia del mando del municipio despedían al personal de la anterior administración.
Esto muestra la falta de respeto a colaboradores del mismo partido que a cambio de participar y promover al PRI en las campañas electorales recibieron en pago un puesto en el gobierno local, sin embargo el cambio de estafeta y de grupo provocó el despido laboral.
Este acto de interponer laudos causó un daño al erario estimado en 600 millones de pesos. Pese a que sólo han cumplido en un 50 por ciento de las demandas interpuestas.
Aunque no hay que olvidar que fueron militantes del PRI y trabajadores al servicio de grupos de poder que dominan la vida pública del municipio y que no sólo vivieron de los impuestos de los contribuyentes, sino que tanto funcionarios cómo ex empleados reclamaron un pago extra al irse.
Hay que recordar que en años anteriores se registraron manifestaciones y reclamos porque al final de cada administración los ex alcaldes; David Sánchez y Roberto Moronatti no cumplieron a los trabajadores con el pago de quincenas devengadas, y en el cambio de gobierno condicionaron a los empleados a ser recontratados a cambio de olvidar el adeudo en salarios.
Pero, tal vez esto no resulte tan grave, ya que llegaron a un acuerdo de compensación, la recontratación laboral o el despido injustificado, pero de esta manera gobierna el PRI el estado de México, despide a ex militantes, militantes que no comulgan con el nuevo grupo en el poder. Problemática laboral generada por la impunidad de la élite del poder.
El caso de Coacalco debe resultar un ejemplo para las autoridades de otros municipios, a no despreciar o ignorar las sentencias administrativas, laborales o mercantiles, “al considerar que no pasa nada, al tener la complicidad de las dependencias del gobierno del estado de México, del poder legislativo y judicial”.
Pero, además este hecho brinda una esperanza a la población de expulsar a personajes corruptos y abusivos que actuaron bajo el amparo de la presidencia municipal, es el caso de Rogelio Castelán, “El Roger”, hermano del edil metido en los negocios turbios de las direcciones de gobierno, de Seguridad Pública, normatividad y en en aquèllas dónde se manejan recursos económicos.
El hermano incómodo del alcalde no sólo se dedicó a extorsionar a la población y comerciantes a tras mano de funcionarios, sino puso en jaque a la policía municipal. Elementos que denunciaron los atropellos e imposiciones del “jefe Oso”, cómo es también conocido.
Sin embargo esto no impidió que en el tramo de la Vía López Portillo que cruza por este municipio, se ha convertido en una frontera de alto riesgo para los automovilistas que resultan extorsionados por elementos de seguridad pública y Vialidad, pese a no contar con la autorización del gobierno estatal para realizar labores de tránsito.
Los elementos de tránsito y de la policía de seguridad pública, son obligados a remitir cada día a seis personas, a quienes se les imponen multas mínimas de 2 500 pesos, de lo contrario tienen que computar con arresto de 48 horas la supuesta infracción al bando municipal. Este es el manejo que se le da al reglamento de policía y buen gobierno en Coacalco.
La ciudadanía espera que con la destitución de Erwin Castelán, estos abusos y excesos de la policía cesen en la localidad, pero no sólo en este rubro sino también en la actividad comercial se frene los atropellos del personal de Normatividad, Gobierno, Desarrollo Urbano…
Gabriel Duran Maldonado, director de gobierno en el desempeño de funciones actúa con fines personales y partidistas de los militantes del PRI, y desdeña el reclamo ciudadano, los comerciantes están a merced de los caprichos de este personaje y lìderes agremiados al partido tricolor.
Aunque en el pasado militantes priistas le imputaron actos de corrupción, sin embargo estàs acusaciones se olvidaron y con los puestos que ha ocupado en la administraciòn ha hecho fortuna al amparo del servicio público.
MANO NEGRA/RM
No hay comentarios.:
Publicar un comentario