Provoca inseguridad que ciudadanos cambien sus hábitos

Toluca, Méx.- La última Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) publicada por el INEGI revela que el 70.2 por ciento de la población aún se siente insegura de salir a la calle, tiene miedo de ser víctima de un delito; además que conductas antisociales como el consumo de bebidas embriagantes en las calles y pandillerismo aumentaron en los últimos tres meses.
El sondeo se realiza, principalmente en las capitales de los estados, para el caso mexiquense se toma como muestra la ciudad de Toluca, aunque es un reflejo de los ciudadanos de la entidad en general.
De acuerdo con el cuarto levantamiento de la ENSU del mes de junio de 2014 en términos de delincuencia, 70.2 por ciento de la población de 18 años y más consideró que vivir en su ciudad es inseguro. En comparación con los resultados de marzo pasado, que fue de 72.4 por ciento, implica una disminución de 2.2 puntos porcentuales.
La ENSU incluye conceptos relevantes en el tema de la seguridad pública, tales como: la sensación de inseguridad por temor al delito (percepción); expectativa social sobre la tendencia del delito; atestiguación de conductas delictivas o antisociales; cambio de rutinas por temor a ser víctima del delito y percepción del desempeño de la policía como autoridad responsable en materia de seguridad pública.
Respecto a la atestiguación de conductas delictivas o antisociales, la población de 18 años y más que reside en las ciudades objeto de estudio, ha escuchado o ha visto en los alrededores de su vivienda en los últimos tres meses el consumo de alcohol en las calles (72.5 por ciento), robos o asaltos (67.0 por ciento) y vandalismo (59.0 por ciento). Las de menor frecuencia fueron, venta o consumo de drogas (42.0 por ciento), bandas violentas o pandillerismo (38.3 por ciento) y disparos frecuentes con armas (26.0 por ciento).
Los resultados obtenidos en los levantamientos anteriores, los mayores incrementos pueden observarse en los referentes al “consumo de alcohol en las calles”, y “bandas violentas o pandillerismo”. En el primer caso, en junio de 2014 hubo un incremento de 3.5 puntos porcentuales respecto al mes de marzo; mientras que en el caso de bandas violentas o pandillerismo, presentaron incrementos de 4.8 y de 3.2 puntos porcentuales, a lo contestado hace 3 meses.
El 65.4 por ciento de la población de 18 años y más que reside en las ciudades objeto de estudio manifestó que por temor a sufrir algún delito modificó sus hábitos respecto a “llevar cosas de valor como joyas, dinero o tarjetas de crédito”; mientras que 51.2 por ciento señaló que modificó sus hábitos respecto a “permitir que salgan de su vivienda sus hijos menores”; 47.8 por ciento cambió rutinas de “caminar por los alrededores de su vivienda después de las ocho de la noche”; y 29.5 por ciento cambió rutinas relativas a “visitar parientes o amigos”.
Respecto a las cifras de meses anteriores, en junio de 2014 el principal incremento se observa en el caso de la población que por la inseguridad cambió sus hábitos para “no permitir que salgan de su vivienda sus hijos menores”, con 3.6 puntos porcentuales respecto a marzo de 2014, con lo cual se ubica ya como el segundo de mayor frecuencia.