México, DF. Al hacer un análisis de las iniciativas de leyes secundarias de la reforma energética, el PRD y sus grupos parlamentarios en el Congreso advirtieron que de aprobarse, existe un grave riesgo para el país: no se garantiza la seguridad energética nacional para los próximos 30 años y se pone en riesgo a comunidades y ejidos, con consecuencias sociales incalculables.
Cuauhtémoc Cárdenas advirtió que "en la llamada ronda cero, Pemex ya perdió no menos de 60 por ciento de las áreas exploratorias; 69 por ciento de los recursos prospectivos: 85 por ciento en recursos prospectivos en Lutitas; 71 por ciento del recurso prospectivo en aguas profundas; 41 por ciento en aguas someras y 17 por ciento en áreas terrestres".
Al dar lectura, junto con Jesús Zambrano, a un documento conjunto, manifestó que con la reforma constitucional Pemex puede perder más áreas si la Secretaría de Energía así lo decide, y "sin que exista ningún mecanismo de apelación".
Este proceso, añadió, se está realizando de forma totalmente discrecional, en ausencia de normas específicas que lo ordenen y transparenten".
Por su parte, Zambrano dijo que se protege más a las compañías extranjeras que comunidades y ejidos.
"Se pasará de un régimen de propiedad nacional a otro privado, que implicará un despojo de la tierra en los procesos de concentración, lo que puede traer consecuencias sociales incalculables, como el desarraigo de pobladores, la ruptura del tejido social, la aparición de fuerzas armadas privadas de las compañías internacionales y cacicazgos locales, injusticia y exacerbación del resentimiento social", indicó.
El análisis del PRD plantea que con las leyes secundarias Pemex llegaría en desventaja con los nuevos participantes, pues el gobierno federal prevé la extracción del petróleo por empresas privadas bajo fórmulas contractuales que les permitirán apropiarse de la mayor parte de la renta petrolera.
Se crea, además, un fondo mexicano del petróleo, cuya principal función "es ser una caja de pagos para las empresas trasnacionales y no un instrumento de ahorro a largo plazo para el desarrollo económico del país".
Señaló que no se plantean mecanismos para fondear el pasivo laboral de Pemex, se margina la investigación y desarrollo tecnológico; y la transparencia es un tema tibiamente abordado.
Afirmó que tampoco se asegura un suministro oportuno y suficiente de energéticos, no hay alivio fiscal para Pemex, pero sí una "revancha histórica" para la paraestatal y la Comisión Federal de Electricidad. Cárdenas enfatizó que el PRD seguirá pugnando porque se realice la consulta popular sobre la reforma en 2015; emitió una alerta hacia la sociedad sobre lo que el gobierno federal se propone y puso a consideración de las fuerzas sociales y políticas, nacionalistas y progresistas, concentrar la lucha en los siguientes temas: eEvitar que se debilite la CFE y Pemex, defensa de comunidades, ejidos y tierras, corrupción, transparencia y rendición de cuentas; evitar el control y la discrecionalidad de la Secretaría de Hacienda; investigación y desarrollo tecnológico, transición energética y medio ambiente.
Cuauhtémoc Cárdenas advirtió que "en la llamada ronda cero, Pemex ya perdió no menos de 60 por ciento de las áreas exploratorias; 69 por ciento de los recursos prospectivos: 85 por ciento en recursos prospectivos en Lutitas; 71 por ciento del recurso prospectivo en aguas profundas; 41 por ciento en aguas someras y 17 por ciento en áreas terrestres".
Al dar lectura, junto con Jesús Zambrano, a un documento conjunto, manifestó que con la reforma constitucional Pemex puede perder más áreas si la Secretaría de Energía así lo decide, y "sin que exista ningún mecanismo de apelación".
Este proceso, añadió, se está realizando de forma totalmente discrecional, en ausencia de normas específicas que lo ordenen y transparenten".
Por su parte, Zambrano dijo que se protege más a las compañías extranjeras que comunidades y ejidos.
"Se pasará de un régimen de propiedad nacional a otro privado, que implicará un despojo de la tierra en los procesos de concentración, lo que puede traer consecuencias sociales incalculables, como el desarraigo de pobladores, la ruptura del tejido social, la aparición de fuerzas armadas privadas de las compañías internacionales y cacicazgos locales, injusticia y exacerbación del resentimiento social", indicó.
El análisis del PRD plantea que con las leyes secundarias Pemex llegaría en desventaja con los nuevos participantes, pues el gobierno federal prevé la extracción del petróleo por empresas privadas bajo fórmulas contractuales que les permitirán apropiarse de la mayor parte de la renta petrolera.
Se crea, además, un fondo mexicano del petróleo, cuya principal función "es ser una caja de pagos para las empresas trasnacionales y no un instrumento de ahorro a largo plazo para el desarrollo económico del país".
Señaló que no se plantean mecanismos para fondear el pasivo laboral de Pemex, se margina la investigación y desarrollo tecnológico; y la transparencia es un tema tibiamente abordado.
Afirmó que tampoco se asegura un suministro oportuno y suficiente de energéticos, no hay alivio fiscal para Pemex, pero sí una "revancha histórica" para la paraestatal y la Comisión Federal de Electricidad. Cárdenas enfatizó que el PRD seguirá pugnando porque se realice la consulta popular sobre la reforma en 2015; emitió una alerta hacia la sociedad sobre lo que el gobierno federal se propone y puso a consideración de las fuerzas sociales y políticas, nacionalistas y progresistas, concentrar la lucha en los siguientes temas: eEvitar que se debilite la CFE y Pemex, defensa de comunidades, ejidos y tierras, corrupción, transparencia y rendición de cuentas; evitar el control y la discrecionalidad de la Secretaría de Hacienda; investigación y desarrollo tecnológico, transición energética y medio ambiente.
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