Córdoba, Ver.- Al menos once restos óseos fueron hallados por miembros de la Brigada Nacional de Búsqueda de Familiares de Desaparecidos, mismos que se localizaron este viernes en terrenos de la comunidad de San Rafael Calería, en el municipio de Córdoba.
Dieron a conocer que son pequeños huesos que al parecer fueron calcinados, al lugar arribó personal de la Fiscalía y de Servicios Periciales junto con el Laboratorio Estatal Móvil de la Dirección de Servicios Periciales para iniciar las investigaciones correspondientes.
Del hallazgo de los restos o fragmentos óseos se logró gracias a una denuncia anónima que se recibió de la parroquia de Los Santos Reyes del municipio de Amatlán, son 11 fragmentos de huesos que se colocaron debajo de sábanas blancas para ubicarlos correctamente.
Mientras tanto, en la parroquia de Amatlán de Los Reyes, un grupo de especialistas y estudiantes de la Universidad de Morelos recaban muestra de sangre de familiares de desaparecidos para subirlos a una base de datos y cuando se encuentren restos óseos estos se comparen para saber si corresponde a algún vecino de esta comunidad.
Cabe decir que los activistas e integrantes de la Brigada Nacional de Búsqueda de Familiares se mantienen resguardados por los elementos de la Policía Federal para que realicen sin problemas las labores de rastreo de fosas clandestinas y restos humanos sin alguna medida de seguridad.
Y es que durante la mañana del jueves y hoy viernes, los expertos en la búsqueda recorrieron la zona de Agustín Millán y entre cañaverales y cafetales de las comunidades rurales de Córdoba, los brigadistas encontraron algunos socavones, en los que descendieron en busca de algún rastro que los pudiera llevar a encontrar los restos de alguna persona de los miles de desaparecidos en el país.
Aquí se hallaron prendas de vestir, que se extrajeron del hoyanco pero no se encontraron algunos indicios de sangre.
Dieron a conocer que son pequeños huesos que al parecer fueron calcinados, al lugar arribó personal de la Fiscalía y de Servicios Periciales junto con el Laboratorio Estatal Móvil de la Dirección de Servicios Periciales para iniciar las investigaciones correspondientes.
Del hallazgo de los restos o fragmentos óseos se logró gracias a una denuncia anónima que se recibió de la parroquia de Los Santos Reyes del municipio de Amatlán, son 11 fragmentos de huesos que se colocaron debajo de sábanas blancas para ubicarlos correctamente.
Mientras tanto, en la parroquia de Amatlán de Los Reyes, un grupo de especialistas y estudiantes de la Universidad de Morelos recaban muestra de sangre de familiares de desaparecidos para subirlos a una base de datos y cuando se encuentren restos óseos estos se comparen para saber si corresponde a algún vecino de esta comunidad.
Cabe decir que los activistas e integrantes de la Brigada Nacional de Búsqueda de Familiares se mantienen resguardados por los elementos de la Policía Federal para que realicen sin problemas las labores de rastreo de fosas clandestinas y restos humanos sin alguna medida de seguridad.
Y es que durante la mañana del jueves y hoy viernes, los expertos en la búsqueda recorrieron la zona de Agustín Millán y entre cañaverales y cafetales de las comunidades rurales de Córdoba, los brigadistas encontraron algunos socavones, en los que descendieron en busca de algún rastro que los pudiera llevar a encontrar los restos de alguna persona de los miles de desaparecidos en el país.
Aquí se hallaron prendas de vestir, que se extrajeron del hoyanco pero no se encontraron algunos indicios de sangre.
Plumas Libres
No hay comentarios.:
Publicar un comentario