Por: José Calzada
DESMANTELAN AL PAN
DESMANTELAN AL PAN
QUE SE VAYA SANTOYO
Este martes, el Partido Acción Nacional sufre la amputación de uno de sus brazos fuertes en la capital veracruzana, Antonio Luna Rosales con 17 años de militancia, operador, servidor público y aspirante a cargos en elección popular en tres ocasiones, decidió abandonar ese partido para no ser sometido al autoritarismo yunista.
Luna Rosales fue hasta hoy uno de los activos más sólidos del PAN en Xalapa, militante desde 1998, operador de redes azules, representante legal ante las autoridades electorales, defensor de triunfos de decenas de candidatos, comprometido con la ideología de Acción Nacional, pero ya no soportó el yugo de Miguel Ángel Yunes Linares y prefiere abandonar su trabajo de 17 años que ser sometido.
El ex delegado federal de la Secretaría de Economía en Veracruz, forma parte de los panistas de cepa que defienden sus derechos para seguir en la política pero no bajo el autoritarismo de quien mantiene al Comité Directivo Estatal del PAN como rehén para satisfacer sus intereses en busca de una venganza, el ex priísta Yunes Linares observa el desmantelamiento de la estructura azul.
Antonio Luna, se une a Víctor Alejandro Vázquez Cuevas quien ahora busca la gubernatura por el PES; Juan Bueno Torio en la misma faena por la vía de candidatura independiente, Alba Leonina Méndez Herrera desde el Partido del Trabajo, y Gerardo Buganza Salmerón quien abandonó al PAN desde que Yunes Linares tomó las riendas hace más de 10 años.
Las cabezas de grupo que cercena la estructura del PAN, por su envestidura lo hacen público, pero hay más grupos que realizan trabajo hormiga para ir contra del empoderamiento de Yunes Linares dentro del PAN y del gobierno del estado, por ejemplo, los grupos locales de Veracruz con la diputada federal, Gabriela Ramírez o bien los de Tierra Blanca de Tito Delfín Cano; Huatulco con Víctor Serradle y qué decir de los de Córdoba que también están ardidos por la imposición de candidaturas y directivos de los comités locales.
La unidad de estos personales que sabían hacer campañas y que mantenían aceitadas las estructuras fue la solidez del PAN para ganar elecciones en las últimas dos décadas en diferentes regiones del estado de Veracruz, pero ahora decidieron abandonar el barco a su suerte para propiciar el descarrilamiento del candidato a la gubernatura de Veracruz y de muchos de los 30 distritos electorales locales que están en disputa en la elección que culmina con la jornada del 5 de junio próximo.
Antonio Luna Rosales se convierte en uno más de los panistas que no soportó ser relegado de sus derechos como militante y con él seguramente abandonarán al PAN decenas de militantes que se sentían representados por él al interior y exterior de ese partido.
Al igual que el resto de los ahora, ex panistas, Luna Rosales dio su lucha con uñas y dientes al interior del PAN para hacer valer sus derechos y al igual que los que ya se fueron chocó en contra de un cacicazgo que no admite voces distintas ni divergencias que abonen a la solidez de un partido que se dice democrático.
Al quedar sola la familia Yunes con el PAN, hará lo que le plazca, es cierto, será la dueña absoluta de Acción Nacional, pero no de la voluntad de los veracruzanos ni de quienes lucharon por dos décadas para convertir a ese partido en una opción viable de gobierno, hoy más que nunca PAN no cuenta con estructuras ni acercamiento social que garantice la cristalización de las ideologías, dicho por sus propios ex militantes.
Este martes, el nuevo ex panista ofrecerá sus motivos para abandonar las filas del PAN, motivos que son idénticos a los que ya se escucharon de otros panistas como el Pipo Vázquez, Juan Bueno Torio y Alba Leonila Méndez Herrera quienes dieron el mismo testimonio para abandonar el partido que les dio nombre.
En el PAN, seguramente el dolor de la nueva amputación arrancará alaridos de los pocos incondicionales de Miguel Ángel Yunes para tratar de desestimar el capital político de Antonio Luna Rosales pero no será suficiente para restaurar el daño que causa su salida.
La madera de que está hecho Antonio Luna se podrá verificar con las ofertas políticas que le harán otros partidos políticos para que se integre a otros colores en ésta o en próximas elecciones, porque no se trata de alguien improvisado, se trata de una persona con capacidades suficientes para provocar un hueco al que fue su partido y también para convertirse en fiel de la balanza para hacer ganar o perder una elección.
QUE SE VAYA SANTOYO
El director general de Tránsito, se convierte en uno más de la lista de indeseables del gobierno del estado en el ocaso de la administración duartista, las múltiples quejas y abusos que son tradición en esa dependencia, acorralan a Roberto López Santoyo como parte de los más delgado de la hebra del gobierno y los servidores públicos del transporte público en la modalidad de taxis, piden su renuncia inmediata.
Un total de 12 mil taxistas agremiados a la Federación Revolucionaria de organizaciones Sindicales del Estado de Veracruz anunciaron bloqueos carreteros sistemáticos encaminados a exigir la renuncia del Director de Tránsito, Roberto López Santoyo por incumplimiento a sus compromisos como funcionario público que firmó desde marzo del 2013.
Los taxistas, reclaman entre sus peticiones la regularización de taxis, cosa que no se ha hecho, del mismo modo no se han parado los atropellos que personal vial viene cometiendo con las grúas en las principales ciudades del estado de Veracruz, para satisfacer intereses de unos cuantos y fomentar la corrupción, mal endémico de Tránsito.
Sobre López Santoyo pesan severos señalamientos en los personal y como jefe de la oficina que es sinónimo de corrupción a la largo y ancho del estado de Veracruz, tal vez las medidas de presión de los inconformes no surtan ningún efecto directo para el funcionario, pero sí lo harán en la percepción social que está harta de los abusos de poder y ese efecto se podrá ver en el resultado de la elección local del próximo 5 de junio.
Este martes, el Partido Acción Nacional sufre la amputación de uno de sus brazos fuertes en la capital veracruzana, Antonio Luna Rosales con 17 años de militancia, operador, servidor público y aspirante a cargos en elección popular en tres ocasiones, decidió abandonar ese partido para no ser sometido al autoritarismo yunista.
Luna Rosales fue hasta hoy uno de los activos más sólidos del PAN en Xalapa, militante desde 1998, operador de redes azules, representante legal ante las autoridades electorales, defensor de triunfos de decenas de candidatos, comprometido con la ideología de Acción Nacional, pero ya no soportó el yugo de Miguel Ángel Yunes Linares y prefiere abandonar su trabajo de 17 años que ser sometido.
El ex delegado federal de la Secretaría de Economía en Veracruz, forma parte de los panistas de cepa que defienden sus derechos para seguir en la política pero no bajo el autoritarismo de quien mantiene al Comité Directivo Estatal del PAN como rehén para satisfacer sus intereses en busca de una venganza, el ex priísta Yunes Linares observa el desmantelamiento de la estructura azul.
Antonio Luna, se une a Víctor Alejandro Vázquez Cuevas quien ahora busca la gubernatura por el PES; Juan Bueno Torio en la misma faena por la vía de candidatura independiente, Alba Leonina Méndez Herrera desde el Partido del Trabajo, y Gerardo Buganza Salmerón quien abandonó al PAN desde que Yunes Linares tomó las riendas hace más de 10 años.
Las cabezas de grupo que cercena la estructura del PAN, por su envestidura lo hacen público, pero hay más grupos que realizan trabajo hormiga para ir contra del empoderamiento de Yunes Linares dentro del PAN y del gobierno del estado, por ejemplo, los grupos locales de Veracruz con la diputada federal, Gabriela Ramírez o bien los de Tierra Blanca de Tito Delfín Cano; Huatulco con Víctor Serradle y qué decir de los de Córdoba que también están ardidos por la imposición de candidaturas y directivos de los comités locales.
La unidad de estos personales que sabían hacer campañas y que mantenían aceitadas las estructuras fue la solidez del PAN para ganar elecciones en las últimas dos décadas en diferentes regiones del estado de Veracruz, pero ahora decidieron abandonar el barco a su suerte para propiciar el descarrilamiento del candidato a la gubernatura de Veracruz y de muchos de los 30 distritos electorales locales que están en disputa en la elección que culmina con la jornada del 5 de junio próximo.
Antonio Luna Rosales se convierte en uno más de los panistas que no soportó ser relegado de sus derechos como militante y con él seguramente abandonarán al PAN decenas de militantes que se sentían representados por él al interior y exterior de ese partido.
Al igual que el resto de los ahora, ex panistas, Luna Rosales dio su lucha con uñas y dientes al interior del PAN para hacer valer sus derechos y al igual que los que ya se fueron chocó en contra de un cacicazgo que no admite voces distintas ni divergencias que abonen a la solidez de un partido que se dice democrático.
Al quedar sola la familia Yunes con el PAN, hará lo que le plazca, es cierto, será la dueña absoluta de Acción Nacional, pero no de la voluntad de los veracruzanos ni de quienes lucharon por dos décadas para convertir a ese partido en una opción viable de gobierno, hoy más que nunca PAN no cuenta con estructuras ni acercamiento social que garantice la cristalización de las ideologías, dicho por sus propios ex militantes.
Este martes, el nuevo ex panista ofrecerá sus motivos para abandonar las filas del PAN, motivos que son idénticos a los que ya se escucharon de otros panistas como el Pipo Vázquez, Juan Bueno Torio y Alba Leonila Méndez Herrera quienes dieron el mismo testimonio para abandonar el partido que les dio nombre.
En el PAN, seguramente el dolor de la nueva amputación arrancará alaridos de los pocos incondicionales de Miguel Ángel Yunes para tratar de desestimar el capital político de Antonio Luna Rosales pero no será suficiente para restaurar el daño que causa su salida.
La madera de que está hecho Antonio Luna se podrá verificar con las ofertas políticas que le harán otros partidos políticos para que se integre a otros colores en ésta o en próximas elecciones, porque no se trata de alguien improvisado, se trata de una persona con capacidades suficientes para provocar un hueco al que fue su partido y también para convertirse en fiel de la balanza para hacer ganar o perder una elección.
QUE SE VAYA SANTOYO
El director general de Tránsito, se convierte en uno más de la lista de indeseables del gobierno del estado en el ocaso de la administración duartista, las múltiples quejas y abusos que son tradición en esa dependencia, acorralan a Roberto López Santoyo como parte de los más delgado de la hebra del gobierno y los servidores públicos del transporte público en la modalidad de taxis, piden su renuncia inmediata.
Un total de 12 mil taxistas agremiados a la Federación Revolucionaria de organizaciones Sindicales del Estado de Veracruz anunciaron bloqueos carreteros sistemáticos encaminados a exigir la renuncia del Director de Tránsito, Roberto López Santoyo por incumplimiento a sus compromisos como funcionario público que firmó desde marzo del 2013.
Los taxistas, reclaman entre sus peticiones la regularización de taxis, cosa que no se ha hecho, del mismo modo no se han parado los atropellos que personal vial viene cometiendo con las grúas en las principales ciudades del estado de Veracruz, para satisfacer intereses de unos cuantos y fomentar la corrupción, mal endémico de Tránsito.
Sobre López Santoyo pesan severos señalamientos en los personal y como jefe de la oficina que es sinónimo de corrupción a la largo y ancho del estado de Veracruz, tal vez las medidas de presión de los inconformes no surtan ningún efecto directo para el funcionario, pero sí lo harán en la percepción social que está harta de los abusos de poder y ese efecto se podrá ver en el resultado de la elección local del próximo 5 de junio.
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