Leonardo Avendaño, estudiante de la UIC, estaba en proceso de discernimiento vocacional sacerdotal.
Ciudad de México.- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México informó que Leonardo Avendaño, estudiante de posgrado en la Universidad Intercontinental (UIC), no fue secuestrado, pero se comprometió a investigar su homicidio y castigar a los culpables, como exigió dicha institución.
La Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas inició el miércoles una carpeta de investigación por la ausencia o extravío del joven de 29 años, quien un día antes –el martes 11– salió de su domicilio en la colonia Aculco, en Iztapalapa, hacia una parroquia a la que asistía habitualmente.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana encontraron ese mismo día su cuerpo envuelto en una cobija, en la parte trasera de su camioneta, que estaba estacionada en la calle Arboledas, colonia Héroes de 1910, con señales de estrangulamiento.
Familiares del estudiante denunciaron en redes sociales que desapareció el martes y fue encontrado un día después sin vida, con signos de tortura y asfixia, y que la burocracia de las autoridades les impedía recuperar su cuerpo en el Instituto de Ciencias Forenses.
“Lo único que pedimos es que las autoridades hagan su trabajo y la debida investigación; que encuentren a los culpables, que no sea un número más, que nos dejen cremarlo como era su voluntad, que se haga justicia, escribieron.
La dependencia informó que tras la denuncia, luego de ser visto por última vez un día antes en la calle Trabajadores Sociales, se activaron los protocolos para su búsqueda y localización, y fue encontrado el miércoles dentro de su auto.
Cuando se realizaban los trámites en la fiscalía, el denunciante recibió una llamada telefónica en la que se le informó que el vehículo había sido localizado en Tlalpan. La Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio inició entonces las pesquisas.
Al realizar las primeras diligencias periciales, se presumió que la víctima tenía 24 o 30 horas de fallecido antes de su hallazgo, y con base en la inspección del lugar, localización de indicios y posición del cadáver, se dedujo que corresponde al lugar de los hechos.
Los denunciantes señalaron que durante la ausencia del estudiante no recibieron comunicación alguna solicitándoles rescate alguno, precisó la procuraduría.
Por su parte, la UIC exigió a las autoridades actuar en consecuencia, investigar, encausar y castigar a los responsables, con el fin de que el hecho no quede impune.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario