México, DF .- La producción de crudo ya no está en declive, por el contrario se registra un crecimiento, pues hay una sustitución de reservas superior al 100 por ciento y el plan de negocios de la paraestatal plantea llegar a los 3 millones de barriles diarios para el 2018, aseguró Emilio Lozoya Austin.
"Contra los pronósticos, la producción se mantiene estable desde el 2009. Tenemos más de 30 años de producción potencial en reservas totales", destacó el director general de Pemex en un comunicado enviado a la BMV. Al clausurar el Seminario la Experiencia de Noruega en Materia Petrolera, el titular de Pemex enumeró una serie de retos financieros, de reestructuración, esquema de pensiones y de inversión a los que se enfrenta la empresa y que si se atienden el País tiene la oportunidad de generar "más energía, más barata y más limpia".
"Si logramos una legislación favorable en la cual se amplíe la participación del sector privado bajo la rectoría del Estado, sin privatizar los yacimientos ni mucho menos el recurso energético, podría detonar el crecimiento de este país de una forma significativa", agregó.
Indicó que los costos de Pemex en exploración y producción son competitivos, en parte porque en los últimos años han tenido yacimientos relativamente fáciles de encontrar y explotar.
"Pero el petróleo fácil se acabó en el mundo", resaltó Lozoya.
El directivo de Pemex aseguró que para enfrentar los retos financieros de la paraestatal es necesario reformar el régimen fiscal a fin de aumentar la inversión, la producción y la contribución fiscal, así como transparentar los subsidios y permitir alianzas estratégicas.
En su ponencia "Modernizando a Pemex", Lozoya se pronunció por encontrar fórmulas para compartir el riesgo, aumentar la inversión, atraer tecnología y mantener la propiedad pública de los hidrocarburos.
En relación a los retos operativos, dijo que se debe reestructurar a Pemex para hacerlo más competitivo, reducir los costos administrativos y hacerlo más transparente, al tiempo de mejorar su desempeño operativo, principalmente en la gestión de proyectos, adquisiciones, manejo de recursos humanos y prácticas operativas.
En cuanto a los retos corporativos, apuntó que se le debe dar flexibilidad presupuestal y operativa a Pemex y establecer un mandato claro para el Consejo de Administración que incluya maximizar el valor económico, metas de desarrollo de la industria nacional, sustentabilidad ambiental y seguridad energética.
"Contra los pronósticos, la producción se mantiene estable desde el 2009. Tenemos más de 30 años de producción potencial en reservas totales", destacó el director general de Pemex en un comunicado enviado a la BMV. Al clausurar el Seminario la Experiencia de Noruega en Materia Petrolera, el titular de Pemex enumeró una serie de retos financieros, de reestructuración, esquema de pensiones y de inversión a los que se enfrenta la empresa y que si se atienden el País tiene la oportunidad de generar "más energía, más barata y más limpia".
"Si logramos una legislación favorable en la cual se amplíe la participación del sector privado bajo la rectoría del Estado, sin privatizar los yacimientos ni mucho menos el recurso energético, podría detonar el crecimiento de este país de una forma significativa", agregó.
Indicó que los costos de Pemex en exploración y producción son competitivos, en parte porque en los últimos años han tenido yacimientos relativamente fáciles de encontrar y explotar.
"Pero el petróleo fácil se acabó en el mundo", resaltó Lozoya.
El directivo de Pemex aseguró que para enfrentar los retos financieros de la paraestatal es necesario reformar el régimen fiscal a fin de aumentar la inversión, la producción y la contribución fiscal, así como transparentar los subsidios y permitir alianzas estratégicas.
En su ponencia "Modernizando a Pemex", Lozoya se pronunció por encontrar fórmulas para compartir el riesgo, aumentar la inversión, atraer tecnología y mantener la propiedad pública de los hidrocarburos.
En relación a los retos operativos, dijo que se debe reestructurar a Pemex para hacerlo más competitivo, reducir los costos administrativos y hacerlo más transparente, al tiempo de mejorar su desempeño operativo, principalmente en la gestión de proyectos, adquisiciones, manejo de recursos humanos y prácticas operativas.
En cuanto a los retos corporativos, apuntó que se le debe dar flexibilidad presupuestal y operativa a Pemex y establecer un mandato claro para el Consejo de Administración que incluya maximizar el valor económico, metas de desarrollo de la industria nacional, sustentabilidad ambiental y seguridad energética.
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