Mazatlán, Sin.- Al reafirmar que Petróleos Mexicanos (Pemex) no se vende ni se privatiza, el Presidente de la Republica, Enrique Peña Nieto afirmó que existen varios acuerdos esenciales que permitirán elevar el potencial de la empresa y ampliar su capacidad de ejecución en la industria de exploración y producción de hidrocarburos para maximizar la renta petrolera del Estado mexicano.
En su mensaje con motivo del 75 aniversario de Pemex, el Primer Mandatario resaltó que se conservará la propiedad del Estado en los hidrocarburos, pero que tenga la capacidad de competir como una empresa de clase mundial, al tiempo de anunciar seis retos para transformar a la paraestatal, porque "la nación seguirá ejerciendo plena soberanía sobre la propiedad, control y la explotación de nuestros hidrocarburos".
"Ese es el mandato de la Constitución y esa es también la firme convicción que tengo como Presidente de la Republica. Tal y como lo expresé el pasado 18 de marzo, Pemex no se vende, ni se privatiza, al contrario Pemex necesita fortalecerse y organizarse, y así habremos de hacerlo por el bien de México".
Después del izamiento de bandera de los buques-tanque Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec, Enrique Peña Nieto abundó que Petróleos Mexicanos debe ser más grande, seguro, eficiente y también más amigable con el medio ambiente; por lo que Pemex debe transformarse "para seguir siendo el motor del desarrollo del país".
Dijo que la paraestatal debe cambiar para corresponder con celeridad y flexibilidad a los nuevos equilibrios energéticos globales, así como a los avances tecnológicos en el uso y eficiencia de diversos combustibles.
Acompañado del titular de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin; del dirigente del Sindicato de Trabajadores de Pemex, Carlos Romero Deschamps; así como de los secretarios de Energía, Pedro Joaquín Coldwell y de Marina, Vidal Soberón Sáez, el político mexiquense sentenció que si se quieren superar los desafíos del Siglo XXI "no podemos seguir operando en esquemas y procedimientos del siglo pasado", por lo que fue aquí donde delineó los seis retos para la empresa petrolera y con ello liberar el gran potencial económico y social del país, "ya que existe un acuerdo esencial para hacer los cambios necesarios que permitan transformar a Pemex, en una empresa pública de carácter productivo, que se conserve como propiedad del Estado, pero que tenga la capacidad de competir como una empresa de clase mundial".
Entre porras y vítores, indicó que está el compromiso de ampliar la capacidad de ejecución de la industria de exploración y de producción de hidrocarburos para maximizar la renta petrolera del Estado mexicano.
Puntualizó que en el primer reto es convertir a Pemex en un modelo de eficiencia, transparencia y rendición de cuentas; ya que "es necesario crear una nueva estructura organizacional que permita agilizar la toma de decisiones y mejorar su capacidad de adaptación, dentro de esta competencia feroz que se da en el orden global".
En el segundo reto, liberará su potencial de inversión e innovación; ya que la empresa debe tener acceso a tecnologías de punta para mejorar su capacidad operativa y de ejecuciones; mientras que en el tercero, afirma que tendrá que afianzarse como una industria generadora de otras industrias.
"El sector petrolero debe incentivar el desarrollo de proveedores nacionales impulsando cadenas y procurando el desarrollo equilibrado de las distintas regiones de nuestro país".
En lo referente al cuarto reto se orientarán las inversiones hacia las actividades de valor agregado y rentabilidad social para el país; en el quinto, se fortalecerá la ética corporativa de la empresa y su responsabilidad social.
"Como empresa del Estado, Petróleos Mexicanos tiene el deber de incrementar su contribución de liberar el bienestar y progreso de las comunidades donde opera".
Y sexto, promover la sustentabilidad ambiental, ya que Mexico exige un Pemex verde, limpio y respetuoso de la naturaleza.
En torno a la entrega de los buque-tanque, mismos que son de ultima generación, el Presidente expresó que el Gobierno tiene claro el proceso de modernización de la empresa de todos los mexicanos y que se unen a la marina mercante nacional.
En esta celebración, Enrique Peña mencionó que Pemex es obra del mayor talento, responsabilidad y visión de una generación de mexicanos que creyó en un mejor futuro para el país, por lo que hace "75 años esta empresa permitió acelerar la modernización del país y amplio los horizontes de bienestar y progreso de nuestra sociedad".
Pidió trabajar juntos para que la petrolera sea una fuente de recursos que dé bienestar en el Siglo XXI y que "esta empresa orgullosamente mexicana escriba una nueva página de grandeza y liderazgo de todos mexicanos".
"Estoy convencido de que si trabajamos y movemos a Pemex, vamos a mover y transformar a México", acotó.
Por último, felicitó a los 160 mil trabajadores, ya que son ellos los que hacen más grande aún a la paraestatal en beneficio de la sociedad. El Presidente abanderó los buques tanque Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec.
En esta ceremonia dijo que estos buques están bajo el amparo de la Bandera mexicana.
"Los buques Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec gozan desde este momento de todos los derechos y obligaciones que establecen las leyes y los reglamentos del país, quedando bajo la protección y amparo de la bandera de México".
Con el izamiento de la bandera de Mexico en los buques, estos pasaron a ser propiedad del Gobierno mexicano en servicio de Pemex.
Peña Nieto realizó un recorrido por el buque Rarámuri, acompañado por el director general de Pemex, Emilio Lozoya; del líder del Sindicato Petrolero de la Republica Mexicana, Carlos Romero Deschamps; así como del titular de la Secretaria de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.
Asimismo, están presentes los gobernadores de Sinaloa, Sonora, Chihuahua.
Enrique Peña Nieto entregó las banderas al capitán de altura, José Gabino Barcelata Pérez, del buque Rarámuri.
El Jefe del Ejecutivo mexicano fue recibido por los trabajadores de Pemex entre porras y vivas: "¡Petroleros, Peña Nieto!, ¡Ole, ole, ole, Peña Nieto, Peña Nieto!".
En su mensaje con motivo del 75 aniversario de Pemex, el Primer Mandatario resaltó que se conservará la propiedad del Estado en los hidrocarburos, pero que tenga la capacidad de competir como una empresa de clase mundial, al tiempo de anunciar seis retos para transformar a la paraestatal, porque "la nación seguirá ejerciendo plena soberanía sobre la propiedad, control y la explotación de nuestros hidrocarburos".
"Ese es el mandato de la Constitución y esa es también la firme convicción que tengo como Presidente de la Republica. Tal y como lo expresé el pasado 18 de marzo, Pemex no se vende, ni se privatiza, al contrario Pemex necesita fortalecerse y organizarse, y así habremos de hacerlo por el bien de México".
Después del izamiento de bandera de los buques-tanque Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec, Enrique Peña Nieto abundó que Petróleos Mexicanos debe ser más grande, seguro, eficiente y también más amigable con el medio ambiente; por lo que Pemex debe transformarse "para seguir siendo el motor del desarrollo del país".
Dijo que la paraestatal debe cambiar para corresponder con celeridad y flexibilidad a los nuevos equilibrios energéticos globales, así como a los avances tecnológicos en el uso y eficiencia de diversos combustibles.
Acompañado del titular de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin; del dirigente del Sindicato de Trabajadores de Pemex, Carlos Romero Deschamps; así como de los secretarios de Energía, Pedro Joaquín Coldwell y de Marina, Vidal Soberón Sáez, el político mexiquense sentenció que si se quieren superar los desafíos del Siglo XXI "no podemos seguir operando en esquemas y procedimientos del siglo pasado", por lo que fue aquí donde delineó los seis retos para la empresa petrolera y con ello liberar el gran potencial económico y social del país, "ya que existe un acuerdo esencial para hacer los cambios necesarios que permitan transformar a Pemex, en una empresa pública de carácter productivo, que se conserve como propiedad del Estado, pero que tenga la capacidad de competir como una empresa de clase mundial".
Entre porras y vítores, indicó que está el compromiso de ampliar la capacidad de ejecución de la industria de exploración y de producción de hidrocarburos para maximizar la renta petrolera del Estado mexicano.
Puntualizó que en el primer reto es convertir a Pemex en un modelo de eficiencia, transparencia y rendición de cuentas; ya que "es necesario crear una nueva estructura organizacional que permita agilizar la toma de decisiones y mejorar su capacidad de adaptación, dentro de esta competencia feroz que se da en el orden global".
En el segundo reto, liberará su potencial de inversión e innovación; ya que la empresa debe tener acceso a tecnologías de punta para mejorar su capacidad operativa y de ejecuciones; mientras que en el tercero, afirma que tendrá que afianzarse como una industria generadora de otras industrias.
"El sector petrolero debe incentivar el desarrollo de proveedores nacionales impulsando cadenas y procurando el desarrollo equilibrado de las distintas regiones de nuestro país".
En lo referente al cuarto reto se orientarán las inversiones hacia las actividades de valor agregado y rentabilidad social para el país; en el quinto, se fortalecerá la ética corporativa de la empresa y su responsabilidad social.
"Como empresa del Estado, Petróleos Mexicanos tiene el deber de incrementar su contribución de liberar el bienestar y progreso de las comunidades donde opera".
Y sexto, promover la sustentabilidad ambiental, ya que Mexico exige un Pemex verde, limpio y respetuoso de la naturaleza.
En torno a la entrega de los buque-tanque, mismos que son de ultima generación, el Presidente expresó que el Gobierno tiene claro el proceso de modernización de la empresa de todos los mexicanos y que se unen a la marina mercante nacional.
En esta celebración, Enrique Peña mencionó que Pemex es obra del mayor talento, responsabilidad y visión de una generación de mexicanos que creyó en un mejor futuro para el país, por lo que hace "75 años esta empresa permitió acelerar la modernización del país y amplio los horizontes de bienestar y progreso de nuestra sociedad".
Pidió trabajar juntos para que la petrolera sea una fuente de recursos que dé bienestar en el Siglo XXI y que "esta empresa orgullosamente mexicana escriba una nueva página de grandeza y liderazgo de todos mexicanos".
"Estoy convencido de que si trabajamos y movemos a Pemex, vamos a mover y transformar a México", acotó.
Por último, felicitó a los 160 mil trabajadores, ya que son ellos los que hacen más grande aún a la paraestatal en beneficio de la sociedad. El Presidente abanderó los buques tanque Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec.
En esta ceremonia dijo que estos buques están bajo el amparo de la Bandera mexicana.
"Los buques Rarámuri, Centla, Jaguaroundi y Texistepec gozan desde este momento de todos los derechos y obligaciones que establecen las leyes y los reglamentos del país, quedando bajo la protección y amparo de la bandera de México".
Con el izamiento de la bandera de Mexico en los buques, estos pasaron a ser propiedad del Gobierno mexicano en servicio de Pemex.
Peña Nieto realizó un recorrido por el buque Rarámuri, acompañado por el director general de Pemex, Emilio Lozoya; del líder del Sindicato Petrolero de la Republica Mexicana, Carlos Romero Deschamps; así como del titular de la Secretaria de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.
Asimismo, están presentes los gobernadores de Sinaloa, Sonora, Chihuahua.
Enrique Peña Nieto entregó las banderas al capitán de altura, José Gabino Barcelata Pérez, del buque Rarámuri.
El Jefe del Ejecutivo mexicano fue recibido por los trabajadores de Pemex entre porras y vivas: "¡Petroleros, Peña Nieto!, ¡Ole, ole, ole, Peña Nieto, Peña Nieto!".
El Sol de México
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