Ciudad de México.- El Servicio de Administración Tributaria (SAT) contará a partir de este año con nuevas medidas que le permiten cruzar información para fiscalizar a los contribuyentes, siendo una de éstas limitar a dos mil pesos los pagos en efectivo que sirvan para realizar deducciones.
Con la Reforma Fiscal se realizaron cambios en el artículo 27 fracción tres de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), donde se estableció que para deducir pagos mayores a dos mil pesos, las personas físicas y morales necesitan contar no sólo con un comprobante fiscal, que en base a las nuevas reglas deberá ser digital, sino también haber realizado el desembolso con un método distinto al efectivo.
Esto significa que al pagar debe hacerse por transferencia electrónica de una cuenta que esté a nombre del contribuyente, utilizando cheques, tarjeta de crédito, débito o servicio, o bien, con un monedero electrónico.
Por ejemplo, cuando una persona moral quiere deducir el ISR de las aportaciones a las reservas del fondo de pensión o jubilación de sus trabajadores, si el pago superó los dos mil pesos, debe hacer la operación a través de un medio electrónico.
Los únicos exentos de esta regla son aquellos que vivan en poblaciones rurales donde no haya servicios financieros. En estos casos, el contribuyente sólo debe pedir una dispensa ante la Administración Local Jurídica que le corresponda, la cual debe presentar junto con la factura al momento de deducir.
Otra excepción ocurre cuando se quiere deducir la adquisición de combustibles para vehículos marítimos, aéreos y terrestres porque el pago debe hacerse por un medio electrónico, aunque sea menor a dos mil pesos.
Paso positivo
José Manuel Velderrain, socio director del despacho Velderrain, Sáenz y Asociados, consideró que este tipo de medidas sirven para contar con toda la información posible sobre los ingresos y gastos de los contribuyentes de manera que se pueda identificar la evasión o elusión fiscal.
“Es positivo que se apliquen este tipo de fiscalización o rendición de cuentas; se trata de obtener datos de terceros, como son los bancos, de la gente que no estaba dada de alta y hace muchos depósitos en sus cuentas bancarias o que consume grandes cantidades y no declara”, resaltó.
Consideró que los sistemas del SAT irán consolidándose poco a poco en el análisis de información porque los datos que recibirán serán muy superiores a lo registrado actualmente.
Con la Reforma Fiscal se realizaron cambios en el artículo 27 fracción tres de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), donde se estableció que para deducir pagos mayores a dos mil pesos, las personas físicas y morales necesitan contar no sólo con un comprobante fiscal, que en base a las nuevas reglas deberá ser digital, sino también haber realizado el desembolso con un método distinto al efectivo.
Esto significa que al pagar debe hacerse por transferencia electrónica de una cuenta que esté a nombre del contribuyente, utilizando cheques, tarjeta de crédito, débito o servicio, o bien, con un monedero electrónico.
Por ejemplo, cuando una persona moral quiere deducir el ISR de las aportaciones a las reservas del fondo de pensión o jubilación de sus trabajadores, si el pago superó los dos mil pesos, debe hacer la operación a través de un medio electrónico.
Los únicos exentos de esta regla son aquellos que vivan en poblaciones rurales donde no haya servicios financieros. En estos casos, el contribuyente sólo debe pedir una dispensa ante la Administración Local Jurídica que le corresponda, la cual debe presentar junto con la factura al momento de deducir.
Otra excepción ocurre cuando se quiere deducir la adquisición de combustibles para vehículos marítimos, aéreos y terrestres porque el pago debe hacerse por un medio electrónico, aunque sea menor a dos mil pesos.
Paso positivo
José Manuel Velderrain, socio director del despacho Velderrain, Sáenz y Asociados, consideró que este tipo de medidas sirven para contar con toda la información posible sobre los ingresos y gastos de los contribuyentes de manera que se pueda identificar la evasión o elusión fiscal.
“Es positivo que se apliquen este tipo de fiscalización o rendición de cuentas; se trata de obtener datos de terceros, como son los bancos, de la gente que no estaba dada de alta y hace muchos depósitos en sus cuentas bancarias o que consume grandes cantidades y no declara”, resaltó.
Consideró que los sistemas del SAT irán consolidándose poco a poco en el análisis de información porque los datos que recibirán serán muy superiores a lo registrado actualmente.
Excelsior
No hay comentarios.:
Publicar un comentario