INSEGURIDAD EN TOLUCA
Hace algunos meses se podía caminar con tranquilidad por Toluca la capital del Estado de México, pero poco a poco la inseguridad ha comenzado a ser tema de conversación de los ciudadanos, ya sea porque vieron algún hecho delictivo o porque fueron objeto de algún asalto o agresión, tanto que en pleno centro de la ciudad ocurren los robos a mano armada pese a la presencia permanente de la policía.
Pero esto solo lo pueden ver los ciudadanos pues las autoridades encabezadas por la alcaldesa, Martha Hilda González Calderón no se dan cuenta porque difícilmente caminan por la ciudad, pues se trasladan a cualquier lugar en auto y hasta con escoltas en el caso de funcionarios de primer nivel.
Sin Embargo, la Alcaldesa se mantiene ocupada en homenajes, actos sociales y en la obtención de reconocimientos inservibles a la ciudadanía. Los discursos que tratan de minimizar el profundo lastre que hiere y lacera a una gran cantidad de ciudadanos de la que algún día fue Toluca la bella, no sirven para nada.
El gobierno local se ha enredado en un sinfín de contradicciones, entre las más graves son, como ejemplo, la estadística de que en Toluca existe una disminución de incidencia delictiva de 32 puntos, según supuestos indicadores de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México.
Compraron patrullas y armas, además de capacitar a los elementos, mejoraron las instalaciones de prácticas de la dirección de seguridad, pero esto no se ve reflejado en las calles.
Hace algunos meses se podía caminar con tranquilidad por Toluca la capital del Estado de México, pero poco a poco la inseguridad ha comenzado a ser tema de conversación de los ciudadanos, ya sea porque vieron algún hecho delictivo o porque fueron objeto de algún asalto o agresión, tanto que en pleno centro de la ciudad ocurren los robos a mano armada pese a la presencia permanente de la policía.
Pero esto solo lo pueden ver los ciudadanos pues las autoridades encabezadas por la alcaldesa, Martha Hilda González Calderón no se dan cuenta porque difícilmente caminan por la ciudad, pues se trasladan a cualquier lugar en auto y hasta con escoltas en el caso de funcionarios de primer nivel.
Sin Embargo, la Alcaldesa se mantiene ocupada en homenajes, actos sociales y en la obtención de reconocimientos inservibles a la ciudadanía. Los discursos que tratan de minimizar el profundo lastre que hiere y lacera a una gran cantidad de ciudadanos de la que algún día fue Toluca la bella, no sirven para nada.
El gobierno local se ha enredado en un sinfín de contradicciones, entre las más graves son, como ejemplo, la estadística de que en Toluca existe una disminución de incidencia delictiva de 32 puntos, según supuestos indicadores de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México.
Compraron patrullas y armas, además de capacitar a los elementos, mejoraron las instalaciones de prácticas de la dirección de seguridad, pero esto no se ve reflejado en las calles.
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