Ciudad de México.- Cada uno de estos asesores es elegido sin ningún tipo de filtro.
Todo ese personal en conjunto costó a la cartera de los mexicanos mil 32 millones de pesos solamente en 2016.
Solamente en un año, el Senado de la República contrató a 565 nuevos asesores, quienes trabajan directamente con los 128 legisladores que lo integran.
Este personal no necesita de filtros que evalúen su perfil para poder entrar a trabajar a la Cámara alta, además de que cuentan con total discrecionalidad para poder ingresar, así, los nuevos prestadores de servicios entraron a la nómina a un promedio de 11 cada semana durante todo el año pasado.
Destaca que según el reporte del ejercicio del gasto al finalizar 2016, el Senado registró la cifra récord de mil 413 asesores, equivalente a un 66 por ciento más que en 2015, cuando tuvieron 848 colaboradores.
A estos nuevos asesores, los cuales son pagados por honorarios, se le suman 302 asesores técnicos, parlamentarios y administrativos, 78 secretarios de comisiones y 17 trabajadores del Canal del Congreso.
Con lo cual, todo ese personal en conjunto costó a la cartera de los mexicanos mil 32 millones de pesos solamente en 2016.
Lo anterior representa un aumento de 31.84 por ciento comparado con 2015, cuando el Senado gastó 782.73 millones de pesos, es decir, 249.7 millones de pesos menos.
Este personal es pagado bajo el concepto de “Remuneraciones a Personal de Carácter Transitorio”.
Incluso se prevé que para este año el Senado gaste otros mil millones de pesos para nuevos asesores, con ello, según el Manual de Remuneraciones, los ciudadanos deberán pagar 634.93 millones de pesos para los “asesores parlamentarios” de la Mesa Directiva, de la Junta de Coordinación Política y de cada uno de los legisladores federales.
Sin embargo, a esto debemos sumarles los honorarios del personal de comisiones, que ascienden a 268.44 millones de pesos.
Todo ese personal en conjunto costó a la cartera de los mexicanos mil 32 millones de pesos solamente en 2016.
Solamente en un año, el Senado de la República contrató a 565 nuevos asesores, quienes trabajan directamente con los 128 legisladores que lo integran.
Este personal no necesita de filtros que evalúen su perfil para poder entrar a trabajar a la Cámara alta, además de que cuentan con total discrecionalidad para poder ingresar, así, los nuevos prestadores de servicios entraron a la nómina a un promedio de 11 cada semana durante todo el año pasado.
Destaca que según el reporte del ejercicio del gasto al finalizar 2016, el Senado registró la cifra récord de mil 413 asesores, equivalente a un 66 por ciento más que en 2015, cuando tuvieron 848 colaboradores.
A estos nuevos asesores, los cuales son pagados por honorarios, se le suman 302 asesores técnicos, parlamentarios y administrativos, 78 secretarios de comisiones y 17 trabajadores del Canal del Congreso.
Con lo cual, todo ese personal en conjunto costó a la cartera de los mexicanos mil 32 millones de pesos solamente en 2016.
Lo anterior representa un aumento de 31.84 por ciento comparado con 2015, cuando el Senado gastó 782.73 millones de pesos, es decir, 249.7 millones de pesos menos.
Este personal es pagado bajo el concepto de “Remuneraciones a Personal de Carácter Transitorio”.
Incluso se prevé que para este año el Senado gaste otros mil millones de pesos para nuevos asesores, con ello, según el Manual de Remuneraciones, los ciudadanos deberán pagar 634.93 millones de pesos para los “asesores parlamentarios” de la Mesa Directiva, de la Junta de Coordinación Política y de cada uno de los legisladores federales.
Sin embargo, a esto debemos sumarles los honorarios del personal de comisiones, que ascienden a 268.44 millones de pesos.
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