México, D.F.- Temas como la competitividad, educación, migración y seguridad formarán parte de la agenda que abordarán los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama y el de México, Enrique Peña Nieto, durante la visita de trabajo que el mandatario estadounidense realizará durante la primera semana de mayo a territorio mexicano.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio a conocer que en una conversación telefónica que sostuvieron los presidentes ayer por la mañana, Obama aceptó la invitación de su homólogo para efectuar esta visita a México, la tercera que realizará al país, ya que estuvo en dos ocasiones a lo largo de su anterior mandato, durante el gobierno de Felipe Calderón.
Al darse a conocer su vista a México el presidente Obama expresó su deseo de que el viaje que realizará tanto a tierras aztecas como a Costa Rica, del 2 al 4 de mayo, sirva para fomentar una relación no sólo basada en seguridad sino en la cooperación económica y el desarrollo.
“Si les ayudamos a crecer, eso puede ser bueno para Estados Unidos, eso puede ser bueno para esos países”, aseguró Barack Obama en entrevistas con las cadenas hispanas Univisión y Telemundo.
El motivo de este viaje, según explicó, es trasladar el interés de EU por fortalecer las relaciones no sólo en torno a los asuntos de seguridad que afectan a México y a Centroamérica, sino sobre las “increíbles oportunidades” de comercio y cooperación energética.
En México, Obama se reunirá con el presidente Enrique Peña Nieto con quien abordará “formas de profundizar” la alianza económica y comercial “y de impulsar la implicación de EU en una amplia gama de asuntos bilaterales, regionales y globales que conectan a los dos países”, según la Casa Blanca.
En las entrevistas, Obama destacó el trabajo realizado con el Gobierno del mexicano Felipe Calderón (2006-2012) en materia económica y de seguridad, pero lamentó que “a veces la relación se caracteriza justamente por ser de frontera o simplemente sobre los cárteles de la droga”, cuando en realidad, apuntó, es más que eso. “Hay mucho más en la relación, en términos de comercio, de intercambio, de energía”, dijo a Telemundo, “y por eso queremos subrayar algo de la estrecha colaboración que ya se ha llevado a cabo y seguir construyendo sobre esa base para crear más trabajo y más oportunidades a ambos lados de la frontera”.
El mandatario, que se mostró, por otro lado, “muy optimista” de que podrá firmar una reforma migratoria integral antes del fin de verano, afirmó que también será “importante” a este respecto la cooperación con México a fin de facilitar el movimiento de bienes y servicios, dijo a la cadena Univisión.
Será el segundo encuentro que sostengan los presidentes de México y EU, ya que el 27 de noviembre de 2012, días antes de que Peña asumiera su investidura como Ejecutivo federal, Obama lo recibió en la Casa Blanca, en un encuentro en el que el mexicano propuso darle un viraje a la relación bilateral, expuso que se debe privilegiar la integración y el fortalecimiento de Norteamérica con la creación de empleos de los dos lados de la frontera.
En esa reunión Peña Nieto marcó el rumbo que busca seguir su gobierno en la relación con Estados Unidos, que durante el sexenio anterior estuvo dominada por el tema de la seguridad, ante la violencia que se recrudeció en México por las operaciones de los Cárteles de la droga, aunque también existió una más estrecha cooperación para enfrentar esta amenaza común, como ocurrió con la Iniciativa Mérida.
Ahora que Peña Nieto recibirá a Obama, acorde con el tono que el presidente mexicano propuso para la relación bilateral, en la agenda que abordarán no se excluye el tema de la seguridad ciudadana, pero el tema de la competitividad aparece en la lista como prioritario.
La SRE informó que durante esta visita en la agenda de temas sobre los que hablarán los mandatarios “se abordará la competitividad, la educación y la innovación, al igual que la facilitación e infraestructura fronteriza, el comercio, la migración y la seguridad ciudadana, entre otros asuntos de interés compartido”.
En un comunicado la Cancillería destacó que el encuentro de los presidentes “permitirá reafirmar la importancia estratégica de la relación bilateral, así como las oportunidades que de ella se derivan”.
Destacó también que “la agenda entre los dos países es amplia e incide de manera directa en ambas sociedades”. Además, indicó la cancillería, “ambos gobiernos trabajan en la identificación de nuevas vías para ampliar los beneficios mutuos de su cooperación en América del Norte y como socios globales responsables”.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio a conocer que en una conversación telefónica que sostuvieron los presidentes ayer por la mañana, Obama aceptó la invitación de su homólogo para efectuar esta visita a México, la tercera que realizará al país, ya que estuvo en dos ocasiones a lo largo de su anterior mandato, durante el gobierno de Felipe Calderón.
Al darse a conocer su vista a México el presidente Obama expresó su deseo de que el viaje que realizará tanto a tierras aztecas como a Costa Rica, del 2 al 4 de mayo, sirva para fomentar una relación no sólo basada en seguridad sino en la cooperación económica y el desarrollo.
“Si les ayudamos a crecer, eso puede ser bueno para Estados Unidos, eso puede ser bueno para esos países”, aseguró Barack Obama en entrevistas con las cadenas hispanas Univisión y Telemundo.
El motivo de este viaje, según explicó, es trasladar el interés de EU por fortalecer las relaciones no sólo en torno a los asuntos de seguridad que afectan a México y a Centroamérica, sino sobre las “increíbles oportunidades” de comercio y cooperación energética.
En México, Obama se reunirá con el presidente Enrique Peña Nieto con quien abordará “formas de profundizar” la alianza económica y comercial “y de impulsar la implicación de EU en una amplia gama de asuntos bilaterales, regionales y globales que conectan a los dos países”, según la Casa Blanca.
En las entrevistas, Obama destacó el trabajo realizado con el Gobierno del mexicano Felipe Calderón (2006-2012) en materia económica y de seguridad, pero lamentó que “a veces la relación se caracteriza justamente por ser de frontera o simplemente sobre los cárteles de la droga”, cuando en realidad, apuntó, es más que eso. “Hay mucho más en la relación, en términos de comercio, de intercambio, de energía”, dijo a Telemundo, “y por eso queremos subrayar algo de la estrecha colaboración que ya se ha llevado a cabo y seguir construyendo sobre esa base para crear más trabajo y más oportunidades a ambos lados de la frontera”.
El mandatario, que se mostró, por otro lado, “muy optimista” de que podrá firmar una reforma migratoria integral antes del fin de verano, afirmó que también será “importante” a este respecto la cooperación con México a fin de facilitar el movimiento de bienes y servicios, dijo a la cadena Univisión.
Será el segundo encuentro que sostengan los presidentes de México y EU, ya que el 27 de noviembre de 2012, días antes de que Peña asumiera su investidura como Ejecutivo federal, Obama lo recibió en la Casa Blanca, en un encuentro en el que el mexicano propuso darle un viraje a la relación bilateral, expuso que se debe privilegiar la integración y el fortalecimiento de Norteamérica con la creación de empleos de los dos lados de la frontera.
En esa reunión Peña Nieto marcó el rumbo que busca seguir su gobierno en la relación con Estados Unidos, que durante el sexenio anterior estuvo dominada por el tema de la seguridad, ante la violencia que se recrudeció en México por las operaciones de los Cárteles de la droga, aunque también existió una más estrecha cooperación para enfrentar esta amenaza común, como ocurrió con la Iniciativa Mérida.
Ahora que Peña Nieto recibirá a Obama, acorde con el tono que el presidente mexicano propuso para la relación bilateral, en la agenda que abordarán no se excluye el tema de la seguridad ciudadana, pero el tema de la competitividad aparece en la lista como prioritario.
La SRE informó que durante esta visita en la agenda de temas sobre los que hablarán los mandatarios “se abordará la competitividad, la educación y la innovación, al igual que la facilitación e infraestructura fronteriza, el comercio, la migración y la seguridad ciudadana, entre otros asuntos de interés compartido”.
En un comunicado la Cancillería destacó que el encuentro de los presidentes “permitirá reafirmar la importancia estratégica de la relación bilateral, así como las oportunidades que de ella se derivan”.
Destacó también que “la agenda entre los dos países es amplia e incide de manera directa en ambas sociedades”. Además, indicó la cancillería, “ambos gobiernos trabajan en la identificación de nuevas vías para ampliar los beneficios mutuos de su cooperación en América del Norte y como socios globales responsables”.
El Universal
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