Chimalhuacán, México.- En los últimos cuatro años el área de Fortalecimiento e Integración Educativa del Centro de Rehabilitación e Integración Social (CRIS) Chimalhuacán, ha atendido a más de 32 mil pacientes con necesidades educativas especiales, en su mayoría infantes menores de diez años de edad.
La coordinadora del área, María Isabel Hernández Valdez, informó que el objetivo de la rehabilitación consiste en desarrollar y estimular habilidades básicas del pensamiento en personas con algún problema cognitivo e integrarlos al sistema educativo regular o especial.
Indicó que actualmente el CRIS trabaja con dependencias federales y estatales de educación especial a fin de canalizar e integrar a los pacientes al ámbito escolar.
“Este tipo de trastornos limitan el proceso de aprendizaje y con ello la integración social, por eso utilizamos métodos psicoterapéuticos y actividades lúdicas a través de las cuales los pacientes logran el autoconocimiento y autorregulación de sus pensamientos y emociones”.
Destacó que el desarrollo de las habilidades cognitivas favorece a niños con problemas de conducta y ayuda a reforzar su autoestima.
A través de juegos los pacientes utilizan los cinco sentidos para identificar distintas formas, tamaños y texturas; además de reconocer características y categorías de alimentos y objetos.
“Es necesario estimularlos con actividades donde pongan en práctica la observación, clasificación, asociación, relación, análisis y organización de elementos, de esta forma amplían sus experiencias y les ayuda a resolver problemas”.
Cabe destacar que el 50 por ciento de los pacientes que atiende actualmente esta área del CRIS son hombres de entre 5 y 9 años de edad.
La coordinadora del área, María Isabel Hernández Valdez, informó que el objetivo de la rehabilitación consiste en desarrollar y estimular habilidades básicas del pensamiento en personas con algún problema cognitivo e integrarlos al sistema educativo regular o especial.
Indicó que actualmente el CRIS trabaja con dependencias federales y estatales de educación especial a fin de canalizar e integrar a los pacientes al ámbito escolar.
“Este tipo de trastornos limitan el proceso de aprendizaje y con ello la integración social, por eso utilizamos métodos psicoterapéuticos y actividades lúdicas a través de las cuales los pacientes logran el autoconocimiento y autorregulación de sus pensamientos y emociones”.
Destacó que el desarrollo de las habilidades cognitivas favorece a niños con problemas de conducta y ayuda a reforzar su autoestima.
A través de juegos los pacientes utilizan los cinco sentidos para identificar distintas formas, tamaños y texturas; además de reconocer características y categorías de alimentos y objetos.
“Es necesario estimularlos con actividades donde pongan en práctica la observación, clasificación, asociación, relación, análisis y organización de elementos, de esta forma amplían sus experiencias y les ayuda a resolver problemas”.
Cabe destacar que el 50 por ciento de los pacientes que atiende actualmente esta área del CRIS son hombres de entre 5 y 9 años de edad.
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