Morelia, Mich.- Unos 700 integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y padres de familia de los 52 normalistas que se encuentran presos en los penales de Morelos y Sonora, instalaron esta mañana un plantón indefinido frente a palacio de gobierno de la capital del estado para exigir la liberación de los estudiantes detenidos el pasado 7 de diciembre en la caseta de peaje de Zirahuén, en la autopista Pátzcuaro-Lázaro Cárdenas.
Desde las seis de la mañana los inconformes comenzaron a instalar casas de campaña y lonas sobre la avenida Madero y la calle Ignacio Zaragoza. Por su lado, el dirigente estatal de la CNTE, Juan José Ortega Madrigal, se reunirá este mediodía con autoridades estatales, pero antes aseguró que si no liberan a los normalistas, no habrá ningún acuerdo.
El titular de la Procuraduría estatal, Martín Godoy Castro, reiteró que están bajo investigación los maestros de la CNTE; varios de ellos tienen órdenes de aprehensión, y acusó que detrás de los normalistas hay maestros del magisterio disidente.
En tanto, maestros de la CNTE tomaron unas 90 alcaldías, a decir de sus dirigentes, y en la escuela primaria Leona Vicario de Huetamo intentaron boicotear una actividad del gobernador Silvano Aureoles, pero decenas de policías federales lo impidieron.
Desde las seis de la mañana los inconformes comenzaron a instalar casas de campaña y lonas sobre la avenida Madero y la calle Ignacio Zaragoza. Por su lado, el dirigente estatal de la CNTE, Juan José Ortega Madrigal, se reunirá este mediodía con autoridades estatales, pero antes aseguró que si no liberan a los normalistas, no habrá ningún acuerdo.
El titular de la Procuraduría estatal, Martín Godoy Castro, reiteró que están bajo investigación los maestros de la CNTE; varios de ellos tienen órdenes de aprehensión, y acusó que detrás de los normalistas hay maestros del magisterio disidente.
En tanto, maestros de la CNTE tomaron unas 90 alcaldías, a decir de sus dirigentes, y en la escuela primaria Leona Vicario de Huetamo intentaron boicotear una actividad del gobernador Silvano Aureoles, pero decenas de policías federales lo impidieron.
La Jornada
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