miércoles, 16 de diciembre de 2015

Hoy dan inicio las tradicionales posadas

México.- Hoy inicia la celebración de las posadas, tradición de quienes profesan la fe católica, aunque también ha sido adoptada por quienes no lo son, pero sólo como pretexto para realizar festejos, entonces pierde toda intención religiosa y de veneración.
Para quienes viven su fe, estas fiestas tienen como fin preparar la Navidad, que inician cada 16 de diciembre y concluyen el 24 de diciembre, cada día de posada representa cada uno de los meses de embarazo de María.
A fines del siglo XVI, los religiosos agustinos ya celebraban en forma de nueve jornadas religiosas el recuerdo del camino emprendido por San José y la Virgen María, que ya llevaba en su seno al Hijo de Dios, para ir a Belén a cumplir el deber de empadronarse.
En los atrios de las Iglesias se veían más concurridas las celebraciones de las "posadas". Al terminar las oraciones y los cánticos, se distribuía fruta, golosinas, y a los niños se les proporcionaba el gusto por romper la piñata. De los atrios las posadas fueron pasando a la vida familiar, donde cobraron su mayor auge.
En México, existe constancia de que en 1587 el religioso agustino fray Diego de San Soria, prior del convento de San Agustín Acolman, en el actual Estado de México, solicitó (y obtuvo) una bula del entonces Papa Sixto V para celebrar anualmente, en esa sede y otras del Virreinato, misas de aguinaldo que recordaran aquel suceso desde el día 16 y hasta el 24 de diciembre.
Al paso del tiempo esta celebración se ha modificado atendiendo no sólo a la tradición, sino también a las posibilidades económicas y los avances tecnológicos.
En el siglo XIX los hogares eran adornados con heno, ramas de pino, farolas de papel o vidrio, y se celebraba la posada de manera muy parecida a la actualidad, pero con la diferencia de que en aquel tiempo se tronaban ruidosos cohetes y se rezaba al momento de la entrada de los peregrinos, después de pedir posada.
Desde la mitad del siglo XX, los adornos de faroles se reemplazaron por foquitos de colores y luces eléctricas. Ya no hay música viva, pero se escucha música grabada para alegrar la fiesta.
En vez de hacer estallar cohetes se distribuyen a los invitados centellantes luces de bengala. Se comenzaron a obsequiar frutas, cacahuates y canastitas con colación a la gente mayor. En el pasado eran canastas de porcelana que se guardaban como recuerdo, pero más tarde se hacían de palma tejida o de cartoncillo, adornadas con papel de china de colores. Hoy en día la colación se reparte en bolsas de plástico con detalles navideños.
En la actualidad, quienes no profesan la religión católica o aunque lo hagan, han convertido las posadas en bailes de salón, donde ya no se recuerda la razón del festejo.

No hay comentarios.:

Entrada destacada

  Denuncian vecinos de la Riviera Veracruzana contaminación de la zona de playas por derrame de aceite. Sin precisar quiénes son los respons...