Estado de México.- Salomón Herrera Buendía, hijo de Guadalupe Buendía Torres, La Loba, la principal fraccionadora de Chimalhuacán y recluida desde el año 2000 por los hechos violentos que se presentaron en la plaza principal del municipio, en los que murieron 10 personas y decenas resultaron heridas, murió aparentemente de cáncer el pasado lunes.
Salomón Herrera estaba prófugo de la justicia desde hace más de 15 años y en algún momento fue uno de los delincuentes más buscados por las autoridades mexiquenses, porque también estuvo acusado de participar en los enfrentamientos entre miembros de Antorcha Popular y la organización de Pueblos y Colonias que lideraba La Loba.
Según vecinos del Barrio Xochiaca, donde estaba la vivienda familiar, el deceso ocurrió durante las primeras horas del lunes. La familia del primogénito de la lideresa priísta que ocupaba de manera ilegal terrenos en Chimalhuacán para después venderlos no ha revelado más detalles sobre el deceso.
La tarde de este martes, los restos de Salomón Herrera fueron sepultados en el panteón del Barrio de Xochiaca. Antes, en la parroquia de la misma comunidad se ofreció una misa de cuerpo presente.
El hijo de La Loba huyó desde el 18 de agosto de 2000 luego de que en la plaza principal de Chimalhuacán antorchistas y seguidores de su madre protagonizaron un enfrentamiento en el que 10 miembros de la organización priísta murieron y decenas más resultaron heridos.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) lo buscaba porque se habían girado cuatro órdenes de aprehensión en su contra, pues se le acusaba de su probable responsabilidad por los hechos de violencia ocurridos el día en el que asumiría el cargo de alcalde, el antorchista Jesús Tolentino Román Bojórquez.
El ex alcalde de Chimalhuacán, también de extracción antorchista, Telesforo García Carreón, hoy diputado federal priísta, denunció que no sólo andaba por el municipio Herrera Buendía, sino que era atendido por funcionarios del gobierno del Estado de México en la gestión de trámites para una organización transportista.
El primogénito de La Loba fue la única persona acusada del homicidio de los antorchistas al que no se le ejercitó acción penal. Nunca piso la cárcel. En cambio, Guadalupe Buendía enfrenta una pena de más de 492 años de prisión en el centro penitenciario de Almoloyita.
Salomón Herrera estaba prófugo de la justicia desde hace más de 15 años y en algún momento fue uno de los delincuentes más buscados por las autoridades mexiquenses, porque también estuvo acusado de participar en los enfrentamientos entre miembros de Antorcha Popular y la organización de Pueblos y Colonias que lideraba La Loba.
Según vecinos del Barrio Xochiaca, donde estaba la vivienda familiar, el deceso ocurrió durante las primeras horas del lunes. La familia del primogénito de la lideresa priísta que ocupaba de manera ilegal terrenos en Chimalhuacán para después venderlos no ha revelado más detalles sobre el deceso.
La tarde de este martes, los restos de Salomón Herrera fueron sepultados en el panteón del Barrio de Xochiaca. Antes, en la parroquia de la misma comunidad se ofreció una misa de cuerpo presente.
El hijo de La Loba huyó desde el 18 de agosto de 2000 luego de que en la plaza principal de Chimalhuacán antorchistas y seguidores de su madre protagonizaron un enfrentamiento en el que 10 miembros de la organización priísta murieron y decenas más resultaron heridos.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) lo buscaba porque se habían girado cuatro órdenes de aprehensión en su contra, pues se le acusaba de su probable responsabilidad por los hechos de violencia ocurridos el día en el que asumiría el cargo de alcalde, el antorchista Jesús Tolentino Román Bojórquez.
El ex alcalde de Chimalhuacán, también de extracción antorchista, Telesforo García Carreón, hoy diputado federal priísta, denunció que no sólo andaba por el municipio Herrera Buendía, sino que era atendido por funcionarios del gobierno del Estado de México en la gestión de trámites para una organización transportista.
El primogénito de La Loba fue la única persona acusada del homicidio de los antorchistas al que no se le ejercitó acción penal. Nunca piso la cárcel. En cambio, Guadalupe Buendía enfrenta una pena de más de 492 años de prisión en el centro penitenciario de Almoloyita.
El Universal
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