CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Coahuila dio a conocer que durante la administración del exgobernador Humberto Moreira no hubo en el estado desvío de recursos ni daño al erario.
El subprocurador ministerial, Norberto Ontiveros, precisó que tras realizar diversas investigaciones, lo único que logró acreditarse es la contratación ilegal de deuda a través de decretos irregulares, según información difundida por el diario Vanguardia.
En 2011 el gobierno estatal informó que la deuda bancaria de Coahuila ascendía a más de 33 mil millones de pesos, de los cuales 5 mil 200 fueron contratados con documentos falsos y 18 mil más sin permiso del Congreso local.
Derivado de ello, dijo Ontiveros, la Auditoría Superior del Estado, la Secretaría de Fiscalización y el Congreso local interpusieron denuncias, mismas que concluyeron en 2012 y 2015, y “a través de peritajes” se estableció que no hubo desvío de recursos.
“No aparece ninguna transacción del gobierno del estado a un particular o a una tercera persona, ni tampoco hubo menoscabo patrimonial, de acuerdo con las indagatorias, como son los peritajes contables”, detalló el subprocurador ministerial.
Añadió: “No tenemos ningún medio de prueba que acredite el desvío de recursos. Hay averiguaciones abiertas y otras que concluyeron. En ninguna se establece desvío”.
Según la información difundida por el diario, en 2005 se heredó una deuda de 323 millones de pesos a la administración de Humberto Moreira, y en 2011, cuando concluyó su sexenio, la deuda bancaria era de 36 mil 600 millones.
El subprocurador ministerial, Norberto Ontiveros, precisó que tras realizar diversas investigaciones, lo único que logró acreditarse es la contratación ilegal de deuda a través de decretos irregulares, según información difundida por el diario Vanguardia.
En 2011 el gobierno estatal informó que la deuda bancaria de Coahuila ascendía a más de 33 mil millones de pesos, de los cuales 5 mil 200 fueron contratados con documentos falsos y 18 mil más sin permiso del Congreso local.
Derivado de ello, dijo Ontiveros, la Auditoría Superior del Estado, la Secretaría de Fiscalización y el Congreso local interpusieron denuncias, mismas que concluyeron en 2012 y 2015, y “a través de peritajes” se estableció que no hubo desvío de recursos.
“No aparece ninguna transacción del gobierno del estado a un particular o a una tercera persona, ni tampoco hubo menoscabo patrimonial, de acuerdo con las indagatorias, como son los peritajes contables”, detalló el subprocurador ministerial.
Añadió: “No tenemos ningún medio de prueba que acredite el desvío de recursos. Hay averiguaciones abiertas y otras que concluyeron. En ninguna se establece desvío”.
Según la información difundida por el diario, en 2005 se heredó una deuda de 323 millones de pesos a la administración de Humberto Moreira, y en 2011, cuando concluyó su sexenio, la deuda bancaria era de 36 mil 600 millones.
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