Xalapa, Ver.- Actores políticos y académicos expertos en finanzas públicas, coinciden que en Veracruz prevalece el desorden financiero, uso de la “licuadora”, endeudamiento y opacidad. Por un lado, el senador priista José Francisco Yunes Zorrilla, presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado acusa que la llamada licuadora, esto es, concentrar el dinero de muchos rubros en una sola cuenta para revolver fondos, utilizada por la administración anterior, ya es usada por el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, donde además existe una deuda de 8 mil millones de pesos tan solo en el primer semestre del año.
“Creo que lo que se dio ya se dispersó y eso es lo que se conoce como licuadora o se conocía como licuadora, es una práctica que se realizaba y que señalamos ya antes en Veracruz y otros estados, esto ante la presión de gastos que tienen los gobiernos de los estados y los pocos ingresos”. El diagnóstico es claro, dice, y lo que se debe hacer es reestructurar la deuda, bajar el gasto y generar otros ingresos para lograr un equilibrio, pues mientras no se haga se seguirán desviando recursos o pidiendo que la Federación resuelva lo que nosotros no somos capaces en el Estado. De paso, recordó que existe un déficit de 10 mil millones de pesos anuales en la Entidad, lo que explica el desvío de recursos, y la práctica de la licuadora. En ese sentido, el académico e investigador de la Universidad Veracruzana (UV), Rafael Arias Hernández, sostiene que el daño financiero ocasionado a Veracruz en el gobierno anterior, se ha acumulado en el gobierno de Miguel Ángel Yunes, y en ese sentido sostiene que el problema es que hay opacidad en el gobierno estatal, lo que no permite saber los números reales, "porque esta confusión, simple y sencillamente va a ocasionar que se le eche toda la culpa al prófugo de Guatemala, y no, ya hay responsabilidades actuales, cuando menos de omisión o de no poder".
En ese sentido, Arias Hernández advierte que la falta de transparencia fomenta que sigan los malos manejos de los recursos públicos, o que alienta la corrupción. “Hay un problema de transparencia muy serio, que yo creo que tenemos que llamar la atención, porque entonces no sabemos, y con toda razón se quejan de que no sabemos lo poco bueno que han hecho, y lo malo que han hecho pues obviamente se vuelve evidente".
Por ahora, refirió, el gobierno de Yunes sólo ha hablado de los malos manejos financieros de la administración de su antecesor, Javier Duarte, pero no ha dicho nada en torno a la manera en que se están ejerciendo los recursos, y menos cómo se encuentran sus finanzas. Explicó que la deuda bancaria es sólo una parte de la deuda total del estado, pues además del tema bancario, está la deuda a distintos proveedores, el sector empresarial, los pensionados, la Universidad Veracruzana, los maestros, y un largo etcétera. Ante ello, emplazó: “vamos a ver si cierto que se logran tres cosas: que los bancos no ganen, que los intermediarios no cobren y que los cómplices en el gobierno no se beneficien, vamos a ver. Ocurren milagros". Y para rematar el tema de las finanzas, la legisladora de Morena, Daniela Griego Ceballos, presidenta de la Comisión Especial para Estudiar y Proponer Alternativas a la Problemática del IPE, advirtió que la crisis financiera del Instituto de Pensiones del Estado, IPE, podría agravarse con los recortes de 2 mil millones de pesos al gasto corriente anunciados por el Gobierno del Estado para el mes de noviembre. Según dijo, ante el anuncio de que se duplicará la reducción del gasto corriente de 2 mil a 4 mil millones de pesos, “obviamente si recortan personal que está cotizando esto pega más en la bolsa que se hace mes con mes para pagar las pensiones, entre lo que cotizan y lo que aportan los patrones”. Por lo anterior, la diputada local consideró que la actual administración debe respetar los derechos laborales de los empleados, y aplicar los ajustes a los capítulos 2000 y 3000, es decir a Materiales y Suministros y Servicios Generales, pero no al de Servicios Personales.
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