lunes, 17 de julio de 2017

Tecnología hecha en la UNAM permite descubrir túnel bajo pirámide de Teotihuacán

Teotihuacán, Estado de México.- La Facultad de Ingeniera de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) creó una tecnología que permite realizar tomografías en tres dimensiones para conocer las condiciones del subsuelo de zonas habitacionales en situación de riesgo, como las zonas minadas de la delegación Álvaro Obregón.
Esta tecnología permitió descubrir un túnel debajo de la Pirámide de la Luna en Teotihuacán, Estado de México.
René Chávez, del Instituto de Geofísica de la UNAM, explicó que encontraron evidencias de un posible túnel que se encuentra a 8 o 10 metros de profundidad, cruza la parte central de la plaza y parece introducirse por debajo de la escalinata de la pirámide, no exactamente al centro.
Científicos colocan electrodos para analizar la base de la Pirámide de la Luna (Noticieros Televisa)
Un grupo de geofísicos de la UNAM, que antes había hecho algo parecido con la Pirámide de Kukulkán en Chichen Itza, realizó una tomografía eléctrica tridimensional a la Pirámide de la Luna.
Andrés Tejero, geofísico de la Facultad de Ingeniera de la UNAM, dijo que la tecnología nace de la necesidad de estudiar edificios colapsados o casas que están sobre zonas de riesgo; no se puede quitar la casa, pero se puede saber que hay debajo.
En la arqueología se utilizó primero en Chichen Itza, con lo que se demostró la existencia de 3 pirámides en Kukulkán.
En la pirámide de la Luna de Teotihuacán se localizó un túnel; los arqueólogos sospechaban que existía, pero no sabían con exactitud en donde estaba, ni de qué tamaño podría ser.
René Chávez agregó que fue un desafío porque la Pirámide de Kukulkán tiene 75 metros de lado, pero la Pirámide de la Luna tiene 150 metros aproximadamente de lado y se tuvieron que utilizar 115 electrodos.
Científicos colocan electrodos para analizar la base de la Pirámide de la Luna (Noticieros Televisa)
Se colocaron los electrodos detectores alrededor de la pirámide, sin tocar las escalinatas.
Rene Chávez explicó que tardaron 4 horas en colocar los electrodos; para la Pirámide de Kukulkán usaron una hora y media.
Las primeras imágenes analizadas muestran el conducto relleno, de 2 o 3 metros de ancho y de alrededor de 150 metros lineales; el túnel podría ser bastante ancho, pero existe la posibilidad de que conduzca a una cámara.
Rene Chávez detalló que la existencia de una cámara cambiaría la historia de los teotihuacanos.
Desde el 2016 han trabajado geofísicos y arqueólogos en la ‘Ciudad de los Dioses’, aún falta el análisis de otras imágenes, cuyos resultados se tendrán en los próximos meses.

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