México, D.F.- Lo más preocupante de la iniciativa de reforma Fiscal presentada por el Ejecutivo es que no se corresponde con un plan ambicioso de austeridad gubernamental, de transparencia o de rendición de cuentas a la ciudadanía, sostuvo la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El organismo consideró que no sería válido “pretender cumplir compromisos de corte popular a costa del aparato productivo” y dijo que la propuesta de Enrique Peña Nieto induce una política fiscal basada en el incremento del gasto público y el endeudamiento gubernamental para financiar programas “sin sustento financiero”.
El presidente de la Coparmex, Juan Pablo Castañón, dijo en su mensaje semanal que los términos de la actual iniciativa en materia de Reforma Fiscal reinstauran una estructura centralista en el gasto público; elevan las tasas impositivas a los contribuyentes cautivos; no buscan abatir la informalidad e introducen graves distorsiones al proceso económico al modificar las reglas impositivas de las empresas.
“Hay que decirlo: no queda claro el rumbo económico que se persigue, especialmente al existir señales contradictorias”.
Puntualizó que se habla de promover la formalidad en el empleo, pero se impulsan medidas que encarecen la generación de empleo formal, al buscar cambios en la ley del IMSS para elevar las cuotas patronales, limitar y en algunos casos restringir la deducibilidad de prestaciones sociales y crear un seguro de desempleo “que deberán fondear las empresas y que impactará necesariamente los recursos de las subcuentas de vivienda de los trabajadores”.
Además criticó que se hable de aumentar la competitividad cuando en los hechos ésta se inhibe con medidas que atentan contra la empresa formal como la propuesta de homologar al resto del país la tasa de IVA en frontera norte.
El sindicato patronal también cuestionó que se argumente que México es el único país de la OCDE sin seguro de desempleo.
“Esa es una información incompleta. Se omite que somos el país con más altas indemnizaciones de la propia OCDE y el cuarto país con mayores indemnizaciones por despido en todo el mundo”.
Añadió que si el Seguro de Desempleo se aprueba sin corregir los costos de indemnización, “estaríamos generando que las empresas mexicanas enfrentaran un doble costo que ningún otro país tiene para la creación de empleos formales”.
Finalmente, la Coparmex hizo un llamado a los legisladores a escuchar las observaciones del sector empresarial sobre la iniciativa de reforma hacendaria, para lograr tasas de crecimiento sostenido del 6 por ciento.
El organismo consideró que no sería válido “pretender cumplir compromisos de corte popular a costa del aparato productivo” y dijo que la propuesta de Enrique Peña Nieto induce una política fiscal basada en el incremento del gasto público y el endeudamiento gubernamental para financiar programas “sin sustento financiero”.
El presidente de la Coparmex, Juan Pablo Castañón, dijo en su mensaje semanal que los términos de la actual iniciativa en materia de Reforma Fiscal reinstauran una estructura centralista en el gasto público; elevan las tasas impositivas a los contribuyentes cautivos; no buscan abatir la informalidad e introducen graves distorsiones al proceso económico al modificar las reglas impositivas de las empresas.
“Hay que decirlo: no queda claro el rumbo económico que se persigue, especialmente al existir señales contradictorias”.
Puntualizó que se habla de promover la formalidad en el empleo, pero se impulsan medidas que encarecen la generación de empleo formal, al buscar cambios en la ley del IMSS para elevar las cuotas patronales, limitar y en algunos casos restringir la deducibilidad de prestaciones sociales y crear un seguro de desempleo “que deberán fondear las empresas y que impactará necesariamente los recursos de las subcuentas de vivienda de los trabajadores”.
Además criticó que se hable de aumentar la competitividad cuando en los hechos ésta se inhibe con medidas que atentan contra la empresa formal como la propuesta de homologar al resto del país la tasa de IVA en frontera norte.
El sindicato patronal también cuestionó que se argumente que México es el único país de la OCDE sin seguro de desempleo.
“Esa es una información incompleta. Se omite que somos el país con más altas indemnizaciones de la propia OCDE y el cuarto país con mayores indemnizaciones por despido en todo el mundo”.
Añadió que si el Seguro de Desempleo se aprueba sin corregir los costos de indemnización, “estaríamos generando que las empresas mexicanas enfrentaran un doble costo que ningún otro país tiene para la creación de empleos formales”.
Finalmente, la Coparmex hizo un llamado a los legisladores a escuchar las observaciones del sector empresarial sobre la iniciativa de reforma hacendaria, para lograr tasas de crecimiento sostenido del 6 por ciento.
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