Luis Ayala Ramos
Toluca, Méx.- Vehículos de diputados locales, dirigentes y militantes del Partido del Trabajo (PT) fueron víctimas de la delincuencia en plena capital del Estado de México, donde cristaleros abrieron las unidades para robar lo que estuviera a la mano.
Los petistas se encontraban la víspera en la primera reunión de trabajo político del año 2014 en las instalaciones del Comité Estatal de ese instituto, cuando los cristales de varios de sus vehículos fueron rotos por vándalos.
Las camionetas oficiales de los diputados Óscar González Yáñez y Norberto Morales Poblete, así como un vehículo utilitario del Partido del Trabajo fueron los más afectados, pues a éstos les reventaron a pedradas todos los vidrios laterales, para abrirlos y después extraer algunos objetos de valor.
La Coordinación Estatal del Partido del Trabajo se localiza en la calle Corregidor Gutiérrez número 101, en la colonia La Merced, en pleno centro de la ciudad de Toluca, donde los llamados "cristaleros" pudieron actuar impunemente por la falta de vigilancia policíaca en la zona.
Pese a que el incidente se reportó a la policía municipal de Toluca tan pronto como los usuarios de los vehículos se dieron cuenta del ilícito, pasaron más de 30 minutos y nunca apareció ninguna patrulla para cerciorarse de los hechos por lo que los dirigentes del Partido del Trabajo prefirieron retirarse del lugar.
Los petistas se encontraban la víspera en la primera reunión de trabajo político del año 2014 en las instalaciones del Comité Estatal de ese instituto, cuando los cristales de varios de sus vehículos fueron rotos por vándalos.
Las camionetas oficiales de los diputados Óscar González Yáñez y Norberto Morales Poblete, así como un vehículo utilitario del Partido del Trabajo fueron los más afectados, pues a éstos les reventaron a pedradas todos los vidrios laterales, para abrirlos y después extraer algunos objetos de valor.
La Coordinación Estatal del Partido del Trabajo se localiza en la calle Corregidor Gutiérrez número 101, en la colonia La Merced, en pleno centro de la ciudad de Toluca, donde los llamados "cristaleros" pudieron actuar impunemente por la falta de vigilancia policíaca en la zona.
Pese a que el incidente se reportó a la policía municipal de Toluca tan pronto como los usuarios de los vehículos se dieron cuenta del ilícito, pasaron más de 30 minutos y nunca apareció ninguna patrulla para cerciorarse de los hechos por lo que los dirigentes del Partido del Trabajo prefirieron retirarse del lugar.
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