Estado de México.- La falta de servicios públicos básicos como agua potable, vivienda, tierras de cultivo, salud y educación, han obligado a un número indeterminado de indígenas mexiquenses y de otros estados del país, a desplazarse de su lugar de origen y concentrarse en la Zona Metropolitana del Valle de México.
Esta situación pudiera evitarse de contar con políticas públicas dirigidas a evitar el desplazamiento o mitigar sus efectos sobre esta población, señaló el maestro Jorge Mercado Mondragón, profesor-investigador del Departamento de Sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Afirma que un factor determinante que obliga al desplazamiento de comunidades completas es la presencia del crimen organizado, que en muchas ocasiones obligan a las familias a abandonar sus patrimonios, despojándolas de sus pocas pertenencias: tierras, animales y sus hogares, para posteriormente apropiarse de su territorio para acciones ilícitas.
A esta situación se suma el despojo de tierras para la construcción de proyectos en zonas indígenas, así como cambios climáticos como las sequías.
El investigador universitario advierte que es urgente el reingreso de la población indígena a sus lugares de origen, porque esta se encuentra en pobreza extrema en municipios urbanos, donde miles de familias sobreviven de la caridad ante la falta de oportunidades.
Además diariamente son agredidos por policías y sufren discriminación en municipios urbanos del valle de México, donde se ven a familias enteras pidiendo limosna.
Indígenas de la zona sur del Estado de México, Hidalgo, Puebla y Oaxaca se trasladan a esta región en busca de trabajo y comida, pero sólo encuentran desprecio, aseguró Jorge Mercado.
Esta situación pudiera evitarse de contar con políticas públicas dirigidas a evitar el desplazamiento o mitigar sus efectos sobre esta población, señaló el maestro Jorge Mercado Mondragón, profesor-investigador del Departamento de Sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Afirma que un factor determinante que obliga al desplazamiento de comunidades completas es la presencia del crimen organizado, que en muchas ocasiones obligan a las familias a abandonar sus patrimonios, despojándolas de sus pocas pertenencias: tierras, animales y sus hogares, para posteriormente apropiarse de su territorio para acciones ilícitas.
A esta situación se suma el despojo de tierras para la construcción de proyectos en zonas indígenas, así como cambios climáticos como las sequías.
El investigador universitario advierte que es urgente el reingreso de la población indígena a sus lugares de origen, porque esta se encuentra en pobreza extrema en municipios urbanos, donde miles de familias sobreviven de la caridad ante la falta de oportunidades.
Además diariamente son agredidos por policías y sufren discriminación en municipios urbanos del valle de México, donde se ven a familias enteras pidiendo limosna.
Indígenas de la zona sur del Estado de México, Hidalgo, Puebla y Oaxaca se trasladan a esta región en busca de trabajo y comida, pero sólo encuentran desprecio, aseguró Jorge Mercado.
El Sol de Toluca
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