México.- Es curioso como en la guerra de “lodo” y, de supuestos logros obtenidos “en beneficio” de los mexicanos, los partidos políticos se burlan de la inteligencia de la sociedad al usar mensajes telenovelados como las frases de una mujer que le dice al desalentado marido que, votar por el PRI es votar a favor de “bajar las tarifas eléctricas”, por mejores salarios y por reformas que “nos benefician a todos”, o en el caso del Verde Ecologista que se abroga infinidad de logros, como si ellos únicamente votaran en las cámaras Alta y Baja del Congreso de la Unión.
En la ruindad de la mezquindad, los partidos políticos están pasando por alto que tanto la Cámara Federal de diputados y la de Senadores se conforman por 500 y 128 miembros, respectivamente, y que cuando una iniciativa de ley es aprobada, esto se logra con la mayoría de los integrantes y no solo con el voto de un partido que ahora se acredita la aprobación de la misma.
Para nadie es secreto que votar por el Partido Verde Ecologista de México es sufragar por el PRI, y en ese tenor, al primero se le está utilizando como protagonista para que acumule todas las multas y descalificaciones y librar al “tricolor” del descrédito, y tal parece que lo están logrando.
Por ello tiene razón la diputada panista, Esther Quintana Salinas cuando afirma que: “es sumamente vergonzosa” la forma en que el Verde presenta iniciativas para después arrogarse su autoría, aunque sean aprobadas por los 500 integrantes de la cámara.
“Siempre es repudiable y reprochable mentir, abusar y manipular”, dijo, y el PVEM ha convertido en práctica sistemática presentar el producto legislativo de todos como exclusivo, cuando el PVEM representa apenas 5 por ciento de la 62 legislatura.
Recordó que esta forma de actuar del Verde ha derivado en varias multas “porque ese partido se brinca las trancas; es un insulto al electorado que nos paga la dieta por estar aquí”.
Pero para PRI y PVEM, la postura de Acción Nacional tiene origen “en el coraje” de ese instituto ante el “crecimiento” del partido aliado al tricolor.
El PAN ha dicho que los verdes utilizan el trabajo parlamentario para su promoción electoral, como la reforma en materia de residuos tóxicos que fue aprobada por todos, y que prevé incluir en el artículo 47 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos la obligación de que las empresas informen del uso como insumo o materia prima, así como reportar el nombre, denominación o razón social y domicilio legal de las compañías.
Y aunque todos los partidos aprobaron el cambio, el PAN insistió en que la actitud del Partido Verde “daña profundamente la democracia y contribuye al desprestigio de los partidos, de por sí tan repudiados por los mexicanos”.
“No se vale ensuciar de esta manera una disciplina tan noble y necesaria”, ante lo que Adriana López Moreno, del PVEM, incluso llegó a reconocer que en la Cámara de Diputados “todos tenemos cola que nos pisen, y hay que hacer que se elimine, pero no lo vamos a lograr con ofensas”.
En fin, la lucha por las curules intermedias está a todo vapor, con lodo, mentidos y desmentidos que más temprano que tarde contaminarán el proceso.
En la ruindad de la mezquindad, los partidos políticos están pasando por alto que tanto la Cámara Federal de diputados y la de Senadores se conforman por 500 y 128 miembros, respectivamente, y que cuando una iniciativa de ley es aprobada, esto se logra con la mayoría de los integrantes y no solo con el voto de un partido que ahora se acredita la aprobación de la misma.
Para nadie es secreto que votar por el Partido Verde Ecologista de México es sufragar por el PRI, y en ese tenor, al primero se le está utilizando como protagonista para que acumule todas las multas y descalificaciones y librar al “tricolor” del descrédito, y tal parece que lo están logrando.
Por ello tiene razón la diputada panista, Esther Quintana Salinas cuando afirma que: “es sumamente vergonzosa” la forma en que el Verde presenta iniciativas para después arrogarse su autoría, aunque sean aprobadas por los 500 integrantes de la cámara.
“Siempre es repudiable y reprochable mentir, abusar y manipular”, dijo, y el PVEM ha convertido en práctica sistemática presentar el producto legislativo de todos como exclusivo, cuando el PVEM representa apenas 5 por ciento de la 62 legislatura.
Recordó que esta forma de actuar del Verde ha derivado en varias multas “porque ese partido se brinca las trancas; es un insulto al electorado que nos paga la dieta por estar aquí”.
Pero para PRI y PVEM, la postura de Acción Nacional tiene origen “en el coraje” de ese instituto ante el “crecimiento” del partido aliado al tricolor.
El PAN ha dicho que los verdes utilizan el trabajo parlamentario para su promoción electoral, como la reforma en materia de residuos tóxicos que fue aprobada por todos, y que prevé incluir en el artículo 47 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos la obligación de que las empresas informen del uso como insumo o materia prima, así como reportar el nombre, denominación o razón social y domicilio legal de las compañías.
Y aunque todos los partidos aprobaron el cambio, el PAN insistió en que la actitud del Partido Verde “daña profundamente la democracia y contribuye al desprestigio de los partidos, de por sí tan repudiados por los mexicanos”.
“No se vale ensuciar de esta manera una disciplina tan noble y necesaria”, ante lo que Adriana López Moreno, del PVEM, incluso llegó a reconocer que en la Cámara de Diputados “todos tenemos cola que nos pisen, y hay que hacer que se elimine, pero no lo vamos a lograr con ofensas”.
En fin, la lucha por las curules intermedias está a todo vapor, con lodo, mentidos y desmentidos que más temprano que tarde contaminarán el proceso.
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