Ciudad de México.- Una muestra de su verdadero rostro sobre a quién apoyan, lo han dado, una vez más, los dueños de las tiendas Chedraui: y es que en Estados Unidos, a través de su cadena de tiendas El Super, que tiene como empleados en su mayoría a inmigrantes y su clientela es mayoritariamente de origen hispano, apoyaron con donaciones económicas la campaña de Donald Trump ahora Presidente Electo de Estados Unidos.
Y esto lo hicieron a través del vicepresidente de El Super, Sal Marcianti, quien realizó 4 donaciones a la campaña presidencial del ultrarreaccionario empresario gringo, lo cual “es grosero y una completa falta de respeto por parte de la empresa hacia quienes les han dado ganancias”, señalan voceros de los trabajadores afiliados al Sindicato de Trabajadores Unidos de la Industria de Alimentos y el Comercio (UFCW, por sus siglas en inglés), que durante más de 3 años han exigido a El Super mejores condiciones laborales, y añaden que “podría decirse que el dinero que este hombre donó a Trump, vino de migrantes, tanto por los que ahí trabajan y por los que le compran”.
La cadena de tiendas El Super representa una cuarta parte de los ingresos netos de Chedraui y contribuye sustancialmente a la rentabilidad general de la empresa.
Por ello, al enterarse de este acto, los trabajadores han manifestado su desacuerdo luego de que se diera a conocer la donación de Marcianti, vicepresidente de la empresa Bodega Latina Corporation, empresa a través de la cual opera Chedraui.
El dato fue encontrado en el Registro de la Comisión Federal de Elecciones y se está compartiendo a las afueras de las tiendas para acrecentar el boicot que los trabajadores sindicalizados llevan promoviendo por meses, señala Rigoberto Valdez, líder del UFCW.
Ahí tiene usted con quién están los hermanos Chedraui.
Como para que el boicot contra sus tiendas en Estados unidos se extendiera a México, especialmente a Veracruz, donde si por algo son tristemente famosos es por pisotear los derechos de sus trabajadores.
Gobernantes
Y esto lo hicieron a través del vicepresidente de El Super, Sal Marcianti, quien realizó 4 donaciones a la campaña presidencial del ultrarreaccionario empresario gringo, lo cual “es grosero y una completa falta de respeto por parte de la empresa hacia quienes les han dado ganancias”, señalan voceros de los trabajadores afiliados al Sindicato de Trabajadores Unidos de la Industria de Alimentos y el Comercio (UFCW, por sus siglas en inglés), que durante más de 3 años han exigido a El Super mejores condiciones laborales, y añaden que “podría decirse que el dinero que este hombre donó a Trump, vino de migrantes, tanto por los que ahí trabajan y por los que le compran”.
La cadena de tiendas El Super representa una cuarta parte de los ingresos netos de Chedraui y contribuye sustancialmente a la rentabilidad general de la empresa.
Por ello, al enterarse de este acto, los trabajadores han manifestado su desacuerdo luego de que se diera a conocer la donación de Marcianti, vicepresidente de la empresa Bodega Latina Corporation, empresa a través de la cual opera Chedraui.
El dato fue encontrado en el Registro de la Comisión Federal de Elecciones y se está compartiendo a las afueras de las tiendas para acrecentar el boicot que los trabajadores sindicalizados llevan promoviendo por meses, señala Rigoberto Valdez, líder del UFCW.
Ahí tiene usted con quién están los hermanos Chedraui.
Como para que el boicot contra sus tiendas en Estados unidos se extendiera a México, especialmente a Veracruz, donde si por algo son tristemente famosos es por pisotear los derechos de sus trabajadores.
Gobernantes
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