Ciudad de México.- El presidente de la Cámara de Diputados, el priista Francisco Arroyo Vieyra, dijo que el problema magisterial en el estado de Guerrero no es solo del gobernador, sino colectivo, por lo que habrá que auxiliarlo como lo hizo la Policía Federal.
Hace unos días, el legislador alertó sobre la gestación de “un cóctel molotov muy desagradable” en dicha entidad, tras la marcha de policías comunitarios armados y las protestas del magisterio en la ciudad de Chilpancingo.
En entrevista en el Programa El Asalto a la Razón con Carlos Marín, el presidente de los diputados dijo que tiene la obligación de hacer valer la Constitución, porque la educativa es una reforma constitucional promulgada, publicada y que rige a cabalidad.
“La Constitución se aplica y lo que matizaría yo es que lo de Guerrero, no es solo el problema del gobernador, es un problema colectivo y habrá que auxiliarlo, como lo auxilió la Policía Federal Preventiva con este comandante ‘Espartaco’, que hizo muy bien las cosas, dialogando, respetando derechos humanos”, afirmó.
Además, comentó que una protesta social de estas características no puede violentar una reforma constitucional ni echar para abajo la voluntad de las dos terceras partes de las cámaras de Diputados y de Senadores.
“Entiendo las circunstancias precisas de una localidad y entiendo lo que pueden ser las motivaciones de una respuesta social de esta naturaleza que, me queda claro, no es mayoritaria, pero que sí es muy estruendosa, una estridencia que escuchar, que hay que darle cauce, que hay que respetar y hasta apoyar al gobernador del estado, que por cierto, es mi amigo personal”, expresó.
Por otra parte, Arroyo mencionó que si en este momento se contara con una escuela normal bilingüe, se podría firmar en este momento con el Congreso de Estados Unidos un tratado migratorio para apoyar a los profesores.
El Economista
Hace unos días, el legislador alertó sobre la gestación de “un cóctel molotov muy desagradable” en dicha entidad, tras la marcha de policías comunitarios armados y las protestas del magisterio en la ciudad de Chilpancingo.
En entrevista en el Programa El Asalto a la Razón con Carlos Marín, el presidente de los diputados dijo que tiene la obligación de hacer valer la Constitución, porque la educativa es una reforma constitucional promulgada, publicada y que rige a cabalidad.
“La Constitución se aplica y lo que matizaría yo es que lo de Guerrero, no es solo el problema del gobernador, es un problema colectivo y habrá que auxiliarlo, como lo auxilió la Policía Federal Preventiva con este comandante ‘Espartaco’, que hizo muy bien las cosas, dialogando, respetando derechos humanos”, afirmó.
Además, comentó que una protesta social de estas características no puede violentar una reforma constitucional ni echar para abajo la voluntad de las dos terceras partes de las cámaras de Diputados y de Senadores.
“Entiendo las circunstancias precisas de una localidad y entiendo lo que pueden ser las motivaciones de una respuesta social de esta naturaleza que, me queda claro, no es mayoritaria, pero que sí es muy estruendosa, una estridencia que escuchar, que hay que darle cauce, que hay que respetar y hasta apoyar al gobernador del estado, que por cierto, es mi amigo personal”, expresó.
Por otra parte, Arroyo mencionó que si en este momento se contara con una escuela normal bilingüe, se podría firmar en este momento con el Congreso de Estados Unidos un tratado migratorio para apoyar a los profesores.
El Economista
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