Estado de México.- Los diputados locales del PRI propusieron sancionar la explotación con fines de mendicidad infantil hasta con 12 años de prisión, pues advirtieron que existen muchos menores en situación vulnerable que podrían ser víctimas de mendicidad forzada, al ser obligados a trabajar o a mendigar en las calles, negándoles sus derechos a la educación, alimentación y a la salud, en un acto de lesa humanidad.
El diputado Apolinar Escobedo refirió que de acuerdo con el INEGI, en el Estado de México hay 4.4 millones de niños de cero a 14 años, pero no todos disfrutan de su niñez, pues muchos viven en situación de calle y, algunas veces, sus papás también laboran en semáforos o parques, y los ponen en riesgo, sobre todo a quienes tienen de cero a cinco años. Los municipios con mayor incidencia son: Ecatepec, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Toluca y Naucalpan.
Lamentó que los cruceros de las calles sean atractivos, pues de acuerdo con algunos estudios, los niños pueden ganar más de dos salarios mínimos por día y hasta 400 pesos durante un solo día, por lo cual, algunos padres de familia consideran correcto enviarlos a trabajar para que contribuyan a los gastos del hogar y el mínimo de los casos son denunciados, aun cuando es un delito y una modalidad de trata.
Los menores que ofrecen dulces, piden dinero y ofrecen limpiar el parabrisas del vehículo, dijo, pueden ser víctimas de una variable "especialmente perversa de la trata de personas" y el fenómeno de la explotación, con fines de mendicidad no ha sido estudiado de manera suficiente, ni se han realizado acciones para prevenirlo.
"Es un delito cometido principalmente por los mismos padres de los menores, quienes aduciendo pobreza extrema y necesidad de pedir dinero, utilizan todo tipo de castigos, abusos y torturas en contra de los menores para lograr su objetivo", advirtió, al tiempo de señalar la necesidad de poner un alto a esas conductas, y prevenir y sancionar, incluso penalmente, esa nefasta práctica.
Las estadísticas en el ámbito educativo, manifestó, muestran que en el Estado de México cuatro de cada 100 personas, de 15 años y más, no saben leer, ni escribir, y 56 de cada 100 sólo cuentan con educación básica terminada. La entidad ocupa el décimo segundo lugar en analfabetismo, con 4.4 por ciento de su población.
"Las cifras son alarmantes, sin embargo, la práctica de la explotación infantil lo es aún más: padres, tutores o encargados del cuidado de los menores, consideran -en un alto porcentaje- que es correcto enviarlos a trabajar para que contribuyan con los gastos del hogar.
"El mínimo de los casos son denunciados por los miembros de la familia, testigos del maltrato y las denuncias de abuso y explotación infantil son presentadas por la sociedad civil o detectadas por el trabajo de previsión que realiza el DIFEM", aseveró.
También dijo que aun cuando algunos prefieren voltear a otro lado, un menor que pide limosna lo hace forzado, contra su voluntad, obligado por sus padres o tutores, en lugar de estar en la escuela, por lo cual advirtió, no se justifica la explotación infantil y propuso sancionar la mendicidad infantil como una modalidad de trata de personas.
El Sol de Toluca
El diputado Apolinar Escobedo refirió que de acuerdo con el INEGI, en el Estado de México hay 4.4 millones de niños de cero a 14 años, pero no todos disfrutan de su niñez, pues muchos viven en situación de calle y, algunas veces, sus papás también laboran en semáforos o parques, y los ponen en riesgo, sobre todo a quienes tienen de cero a cinco años. Los municipios con mayor incidencia son: Ecatepec, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Toluca y Naucalpan.
Lamentó que los cruceros de las calles sean atractivos, pues de acuerdo con algunos estudios, los niños pueden ganar más de dos salarios mínimos por día y hasta 400 pesos durante un solo día, por lo cual, algunos padres de familia consideran correcto enviarlos a trabajar para que contribuyan a los gastos del hogar y el mínimo de los casos son denunciados, aun cuando es un delito y una modalidad de trata.
Los menores que ofrecen dulces, piden dinero y ofrecen limpiar el parabrisas del vehículo, dijo, pueden ser víctimas de una variable "especialmente perversa de la trata de personas" y el fenómeno de la explotación, con fines de mendicidad no ha sido estudiado de manera suficiente, ni se han realizado acciones para prevenirlo.
"Es un delito cometido principalmente por los mismos padres de los menores, quienes aduciendo pobreza extrema y necesidad de pedir dinero, utilizan todo tipo de castigos, abusos y torturas en contra de los menores para lograr su objetivo", advirtió, al tiempo de señalar la necesidad de poner un alto a esas conductas, y prevenir y sancionar, incluso penalmente, esa nefasta práctica.
Las estadísticas en el ámbito educativo, manifestó, muestran que en el Estado de México cuatro de cada 100 personas, de 15 años y más, no saben leer, ni escribir, y 56 de cada 100 sólo cuentan con educación básica terminada. La entidad ocupa el décimo segundo lugar en analfabetismo, con 4.4 por ciento de su población.
"Las cifras son alarmantes, sin embargo, la práctica de la explotación infantil lo es aún más: padres, tutores o encargados del cuidado de los menores, consideran -en un alto porcentaje- que es correcto enviarlos a trabajar para que contribuyan con los gastos del hogar.
"El mínimo de los casos son denunciados por los miembros de la familia, testigos del maltrato y las denuncias de abuso y explotación infantil son presentadas por la sociedad civil o detectadas por el trabajo de previsión que realiza el DIFEM", aseveró.
También dijo que aun cuando algunos prefieren voltear a otro lado, un menor que pide limosna lo hace forzado, contra su voluntad, obligado por sus padres o tutores, en lugar de estar en la escuela, por lo cual advirtió, no se justifica la explotación infantil y propuso sancionar la mendicidad infantil como una modalidad de trata de personas.
El Sol de Toluca
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