Ciudad de México.- La presidenta de la Comisión Especial de Salud Mental y Drogas, diputada Leticia Amparano Gamez, indicó que debe haber un análisis real de la minuta votada en el Senado sobre el uso de la mariguana y que no sea por instrucción, sino por convicción de que las cosas están bien hechas, que se avale en la Cámara de Diputados.
“Hemos encontrado 80 mil jiribillas en el dictamen y estamos trabajando en su análisis y dando aviso al coordinador y a nuestra bancada para que no avance hasta que no podamos quedar más convencidos o tengamos más tiempo para su análisis”, afirmó.
Precisó que “se pretende que la votemos este jueves y Acción Nacional está completamente en desacuerdo de hacerlo tan rápido y que nos la presenten la minuta de un día para otro”.
Apuntó que “viene muy a favor de la dinámica terapéutica pero hay detalles que nos inquietan. No estamos en contra, pero debe ser algo bien hecho para que realmente funcione”.
En reunión de trabajo, la Comisión Especial se reunió con expertos en temas de salud mental y drogas, a fin de recibir propuestas para entramar el proyecto de una ley general en esas materias.
La legisladora comentó que “nos interesa mucho trabajar una ley de salud mental. Queremos presentar la propuesta el siguiente periodo ordinario. Trabajarlo con las distintas bancadas y con el secretario de Salud, José Narro”.
El objetivo, aseguró, es empoderar esos asuntos y que todos los legisladores conozcan porque se tiene que atender. “Los temas de salud mental y las drogas se tienen que hablar a la luz y no en un cuarto oscuro”.
Refirió que “el tema de trastornos mentales sí da para una Ley General, pero tenemos que justificarlo. Se puede trabajar con una propuesta que ya tiene la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic)”.
Detalló que “a los estados anualmente les llegan 400 mil pesos para atender la salud mental. No hay modelos de apoyo, ni infraestructura, ni mejora de las unidades estatales de psiquiatría”.
Puntualizó que no hay lugares en el sector salud, ni programas reales de prevención ante los serios problemas de drogadicción. “Hay muchas dificultades, por ejemplo, en comunidades indígenas”.
Agregó que es importante trabajar y hacer equipo con expertos para tener propuestas legislativas con un “chaleco a la medida” sobre los temas de salud mental y adicciones.
“Si comparamos las propuestas sobre drogas con las de salubridad mental, vemos que hay mucho que trabajar y hay estigmas que quitar sobre estos padecimientos, así que debemos trabajar en conjunto”, añadió.
El diputado Guadalupe Hernández Alcalá (PRD) explicó que no hay en el país un tratamiento eficaz para los pacientes adentrados en el universo de las drogas, y los hospitales psiquiátricos tampoco tienen las características para tratar a los pacientes.
Consideró que la Secretaría de Salud hace esfuerzos importantes con programas preventivos sobre el uso de drogas, pero es imposible atender a todos los pacientes con estos problemas.
Lo anterior, agregó, da paso a la clandestinidad para supuestos centros de atención a adicciones. “Todo mundo pone casas improvisadas con malas condiciones de higiene y donde tratan de manera pésima a los pacientes”.
El representante Regional de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en México, Antonio Luigi Mazzitelli, manifestó que la postura de la oficina es muy clara, “el problema de drogas tiene que ser observado independientemente de la sustancia”.
En ese sentido, dijo, más que la propuesta de ley sobre el uso de la mariguana, recomendó que se reflexione y se revise esa legislación y se modifique lo necesario para que el conflicto de la droga se mire desde una perspectiva de salud, sin importar el producto.
A nivel internacional las drogas de ayer no son las de hoy y, seguramente, no serán las de mañana. Lo que se debe legislar es la postura del Estado frente al problema de las drogas, no sólo el conflicto con la mariguana, cocaína o metanfetaminas.
Todos los consumidores deben tener derechos a un tratamiento, sin importar la sustancia que consuman y desde el punto de los derechos humanos, dijo, no se habla de penas sustitutivas, medidas alternativas al encarcelamiento o todo lo que ayude a un pequeño infractor a ser reinsertado a la sociedad.
Los cambios que vengan en el tema de mariguana, dijo, deben ser eventual y necesariamente extendidos a otras drogas, pero con un enfoque de salud y no de represión.
La especialista de la UNODC, Estefania De La Paz Nicolau, consideró que se debe buscar un enfoque para las minorías y de género en el tema del consumo de cualquier droga. “Son grupos vulnerables que no se pueden atender de la misma forma”.
Es relevante crear una ley general, porque sí hay mucho de donde y dejar el enfoque únicamente de mariguana. “Hay muchas drogas que ya existen de las cuales no tenemos conocimiento, por lo que se requiere un perspectiva más amplia”.
El director general de H&E International Consulting Group, Edgar Angulo Rosas, comentó que se deben replantear las tasas impositivas del tabaco y alcohol para obtener recursos que se puedan destinar a programas de prevención y tratamiento de adicciones.
Se pronunció por generar mesas de trabajo en materia de temas económicos y, por otro lado, la administración de la justicia y reparación del daño.
En representación de los Centros de Integración Juvenil, A.C. José Ángel Prado García, comentó que no se debe transitar por el camino más sencillo, sino el más importante. “El tema de las drogas tiene muchos aristas y es más amplio que sólo la salud. Se debe pensar en una ley general sobre salud mental y drogas”.
Lo anterior, sostuvo, colocaría a México como un país de avanzada y es sensato, dado que “existe una ley para el tabaco, que con mayor razón tengamos una sobre estupefacientes”.
Finalmente, el presidente de la Fundación Renacimiento, IAP, José Vallejo Flores, estimó que un tema importante es la situación de los menores. Las leyes hablan del interés superior de los menores y por ello hay que saber qué atención se debe dar a los infantes frente al consumo de drogas. “Si se genera una Ley General al respecto se debe poner énfasis a este sector, que es el futuro de la sociedad”.
“Hemos encontrado 80 mil jiribillas en el dictamen y estamos trabajando en su análisis y dando aviso al coordinador y a nuestra bancada para que no avance hasta que no podamos quedar más convencidos o tengamos más tiempo para su análisis”, afirmó.
Precisó que “se pretende que la votemos este jueves y Acción Nacional está completamente en desacuerdo de hacerlo tan rápido y que nos la presenten la minuta de un día para otro”.
Apuntó que “viene muy a favor de la dinámica terapéutica pero hay detalles que nos inquietan. No estamos en contra, pero debe ser algo bien hecho para que realmente funcione”.
En reunión de trabajo, la Comisión Especial se reunió con expertos en temas de salud mental y drogas, a fin de recibir propuestas para entramar el proyecto de una ley general en esas materias.
La legisladora comentó que “nos interesa mucho trabajar una ley de salud mental. Queremos presentar la propuesta el siguiente periodo ordinario. Trabajarlo con las distintas bancadas y con el secretario de Salud, José Narro”.
El objetivo, aseguró, es empoderar esos asuntos y que todos los legisladores conozcan porque se tiene que atender. “Los temas de salud mental y las drogas se tienen que hablar a la luz y no en un cuarto oscuro”.
Refirió que “el tema de trastornos mentales sí da para una Ley General, pero tenemos que justificarlo. Se puede trabajar con una propuesta que ya tiene la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic)”.
Detalló que “a los estados anualmente les llegan 400 mil pesos para atender la salud mental. No hay modelos de apoyo, ni infraestructura, ni mejora de las unidades estatales de psiquiatría”.
Puntualizó que no hay lugares en el sector salud, ni programas reales de prevención ante los serios problemas de drogadicción. “Hay muchas dificultades, por ejemplo, en comunidades indígenas”.
Agregó que es importante trabajar y hacer equipo con expertos para tener propuestas legislativas con un “chaleco a la medida” sobre los temas de salud mental y adicciones.
“Si comparamos las propuestas sobre drogas con las de salubridad mental, vemos que hay mucho que trabajar y hay estigmas que quitar sobre estos padecimientos, así que debemos trabajar en conjunto”, añadió.
El diputado Guadalupe Hernández Alcalá (PRD) explicó que no hay en el país un tratamiento eficaz para los pacientes adentrados en el universo de las drogas, y los hospitales psiquiátricos tampoco tienen las características para tratar a los pacientes.
Consideró que la Secretaría de Salud hace esfuerzos importantes con programas preventivos sobre el uso de drogas, pero es imposible atender a todos los pacientes con estos problemas.
Lo anterior, agregó, da paso a la clandestinidad para supuestos centros de atención a adicciones. “Todo mundo pone casas improvisadas con malas condiciones de higiene y donde tratan de manera pésima a los pacientes”.
El representante Regional de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en México, Antonio Luigi Mazzitelli, manifestó que la postura de la oficina es muy clara, “el problema de drogas tiene que ser observado independientemente de la sustancia”.
En ese sentido, dijo, más que la propuesta de ley sobre el uso de la mariguana, recomendó que se reflexione y se revise esa legislación y se modifique lo necesario para que el conflicto de la droga se mire desde una perspectiva de salud, sin importar el producto.
A nivel internacional las drogas de ayer no son las de hoy y, seguramente, no serán las de mañana. Lo que se debe legislar es la postura del Estado frente al problema de las drogas, no sólo el conflicto con la mariguana, cocaína o metanfetaminas.
Todos los consumidores deben tener derechos a un tratamiento, sin importar la sustancia que consuman y desde el punto de los derechos humanos, dijo, no se habla de penas sustitutivas, medidas alternativas al encarcelamiento o todo lo que ayude a un pequeño infractor a ser reinsertado a la sociedad.
Los cambios que vengan en el tema de mariguana, dijo, deben ser eventual y necesariamente extendidos a otras drogas, pero con un enfoque de salud y no de represión.
La especialista de la UNODC, Estefania De La Paz Nicolau, consideró que se debe buscar un enfoque para las minorías y de género en el tema del consumo de cualquier droga. “Son grupos vulnerables que no se pueden atender de la misma forma”.
Es relevante crear una ley general, porque sí hay mucho de donde y dejar el enfoque únicamente de mariguana. “Hay muchas drogas que ya existen de las cuales no tenemos conocimiento, por lo que se requiere un perspectiva más amplia”.
El director general de H&E International Consulting Group, Edgar Angulo Rosas, comentó que se deben replantear las tasas impositivas del tabaco y alcohol para obtener recursos que se puedan destinar a programas de prevención y tratamiento de adicciones.
Se pronunció por generar mesas de trabajo en materia de temas económicos y, por otro lado, la administración de la justicia y reparación del daño.
En representación de los Centros de Integración Juvenil, A.C. José Ángel Prado García, comentó que no se debe transitar por el camino más sencillo, sino el más importante. “El tema de las drogas tiene muchos aristas y es más amplio que sólo la salud. Se debe pensar en una ley general sobre salud mental y drogas”.
Lo anterior, sostuvo, colocaría a México como un país de avanzada y es sensato, dado que “existe una ley para el tabaco, que con mayor razón tengamos una sobre estupefacientes”.
Finalmente, el presidente de la Fundación Renacimiento, IAP, José Vallejo Flores, estimó que un tema importante es la situación de los menores. Las leyes hablan del interés superior de los menores y por ello hay que saber qué atención se debe dar a los infantes frente al consumo de drogas. “Si se genera una Ley General al respecto se debe poner énfasis a este sector, que es el futuro de la sociedad”.
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