Ciudad de México.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) externó su indignación y urgió a las autoridades esclarecer el homicidio de la activista Miriam Elizabeth Rodríguez, perpetrado anoche, en San Fernando, Tamaulipas.
El organismo demandó llevar a cabo una investigación exhaustiva para detener a los responsables y que respondan ante la justicia, por el homicidio de la representante del Colectivo de Familiares de Desaparecidos en San Fernando.
Este Organismo Nacional subraya, una vez más, el incumplimiento de las autoridades de los tres niveles de gobierno en cuanto a su obligación de proveer seguridad pública para prevenir las posibles violaciones a los derechos fundamentales de quienes se desempeñan como defensoras y defensores y están en situación de riesgo" denunció la CNDH en un comunicado.
Miriam Rodríguez sufrió hace algunos años la desaparición de su hija Karen Alejandra, cuyos restos encontró después de una búsqueda que emprendió con sus medios y recursos, en una fosa clandestina, en San Fernando.
“Se trata de la muerte de una defensora que decidió y tuvo el valor de romper el silencio ante la desaparición y muerte de su hija, que dedicó sus esfuerzos a localizar sus restos y que tuvo la valentía de identificar a los responsables”, lamentó la CNDH.
El organismo demandó llevar a cabo una investigación exhaustiva para detener a los responsables y que respondan ante la justicia, por el homicidio de la representante del Colectivo de Familiares de Desaparecidos en San Fernando.
Este Organismo Nacional subraya, una vez más, el incumplimiento de las autoridades de los tres niveles de gobierno en cuanto a su obligación de proveer seguridad pública para prevenir las posibles violaciones a los derechos fundamentales de quienes se desempeñan como defensoras y defensores y están en situación de riesgo" denunció la CNDH en un comunicado.
Miriam Rodríguez sufrió hace algunos años la desaparición de su hija Karen Alejandra, cuyos restos encontró después de una búsqueda que emprendió con sus medios y recursos, en una fosa clandestina, en San Fernando.
“Se trata de la muerte de una defensora que decidió y tuvo el valor de romper el silencio ante la desaparición y muerte de su hija, que dedicó sus esfuerzos a localizar sus restos y que tuvo la valentía de identificar a los responsables”, lamentó la CNDH.
Excelsior
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