Texcoco, Estado de México.- A pesar de que el presidente municipal de Texcoco, en el Estado de México, Higinio Martínez Miranda se comprometió hace unos meses con los vecinos del barrio de la Zaragoza-San Pablo a que ninguna casa del fraccionamiento Hacienda San Javier sería entregada hasta contar con todos los servicios básicos, SUPREMO constató que esto fue mentira porque alrededor de 15 familias ya viven ahí y las casas tienen agua, luz, y drenaje.
En entrevista, algunos vecinos de la zona señalaron a SUPREMO la situación por la que atraviesan dichos inmuebles; cierto es que no están conectados al agua ni al drenaje municipal; “les distribuyen el agua a través de pipas a una cisterna y con un sistema de bombeo es como la abastecen, aunque este sistema no será tan funcional a medida que se integren más familias, es una manera rápida de solucinarlo”, externaron.
En tanto que la situación con los desechos residuales (aguas negras) argumentaron “se están acumulando internamente, es decir. No tienen salida de momento. Si se incrementara la temperatura, iniciarían los malos olores” señalaron.
Asimismo agregaron que tras una verificación en una de las casas, los vecinos detectaron la inexistencia de medidores de luz, “carecen de un medidor, ya que el dispositivo se encuentra puenteado, a manera de que las pocas familias cuenten con servicio de luz”, explicaron.
Sin lugar a dudas, esta situación confirma otro incumplimiento más por parte de las autoridades municipales y la constructora, quienes omiten la indicación al Acuerdo emitido por la Gaceta Oficial del Estado de México con fecha de diciembre de 2015, donde se indica que la ocupación de los lotes podrá efectuarse “cuando estén ejecutadas y en servicio las obras de agua potable, drenaje y abastecimiento de energía eléctrica de la etapa o sección que se vaya a ocupar, además de que estén concluidos, en la parte proporcional que corresponda los accesos viales y los equipamientos respectivos, conforme lo dispone el artículo 73 del Reglamento del Libro Quinto del Código Administrativo del Estado de México.”
De acuerdo con los inconformes, las omisiones por parte de éstos han sido varias, pero aclaran que su postura continúa siendo la misma, “no a la conexión a los servicios públicos municipales de agua y de drenaje”. Por lo que, iniciarán con nuevas estrategias para sus demandas.
Cierto es que durante estos siete meses de manifestar su inconformidad a las irregularidades que ha generado el proyecto de las 970 casas, los vecinos de la Zaragoza-San Pablo confirman algunos logros pero están firmes que esta situación aún no concluye y, por ende, no desistirán de su objetivo principal y continuarán exhibiendo las malas decisiones por parte de la actual administración que pueden mermar su calidad de vida presente y futura, por cuestiones de escasez de agua, saturación de drenaje, entre otros problemas sociales.
En entrevista, algunos vecinos de la zona señalaron a SUPREMO la situación por la que atraviesan dichos inmuebles; cierto es que no están conectados al agua ni al drenaje municipal; “les distribuyen el agua a través de pipas a una cisterna y con un sistema de bombeo es como la abastecen, aunque este sistema no será tan funcional a medida que se integren más familias, es una manera rápida de solucinarlo”, externaron.
En tanto que la situación con los desechos residuales (aguas negras) argumentaron “se están acumulando internamente, es decir. No tienen salida de momento. Si se incrementara la temperatura, iniciarían los malos olores” señalaron.
Asimismo agregaron que tras una verificación en una de las casas, los vecinos detectaron la inexistencia de medidores de luz, “carecen de un medidor, ya que el dispositivo se encuentra puenteado, a manera de que las pocas familias cuenten con servicio de luz”, explicaron.
Sin lugar a dudas, esta situación confirma otro incumplimiento más por parte de las autoridades municipales y la constructora, quienes omiten la indicación al Acuerdo emitido por la Gaceta Oficial del Estado de México con fecha de diciembre de 2015, donde se indica que la ocupación de los lotes podrá efectuarse “cuando estén ejecutadas y en servicio las obras de agua potable, drenaje y abastecimiento de energía eléctrica de la etapa o sección que se vaya a ocupar, además de que estén concluidos, en la parte proporcional que corresponda los accesos viales y los equipamientos respectivos, conforme lo dispone el artículo 73 del Reglamento del Libro Quinto del Código Administrativo del Estado de México.”
De acuerdo con los inconformes, las omisiones por parte de éstos han sido varias, pero aclaran que su postura continúa siendo la misma, “no a la conexión a los servicios públicos municipales de agua y de drenaje”. Por lo que, iniciarán con nuevas estrategias para sus demandas.
Cierto es que durante estos siete meses de manifestar su inconformidad a las irregularidades que ha generado el proyecto de las 970 casas, los vecinos de la Zaragoza-San Pablo confirman algunos logros pero están firmes que esta situación aún no concluye y, por ende, no desistirán de su objetivo principal y continuarán exhibiendo las malas decisiones por parte de la actual administración que pueden mermar su calidad de vida presente y futura, por cuestiones de escasez de agua, saturación de drenaje, entre otros problemas sociales.
PS
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