La presidenta municipal morenista de Chimalhuacán, Xochitl Flores Jiménez, pretende desviar la atención y evadir la responsabilidad de su administración por contratar personal sin capacitación para manejar el sistema hidráulico, lo que causo el colapso del tanque de agua potable Adolfo López Mateos, el cual dejó como saldo 11 personas lesionadas.
La alcaldesa pretende acusar a las administraciones anteriores del accidente porque presuntamente utilizar materiales de baja calidad en la instalación del tanque, lo cual causó, según ella, el accidente del 25 de noviembre en la colonia Vitálico Silva, así lo señaló en conferencia de prensa Telésforo García Carreón, dirigente Estatal de Movimiento Antorchista en Chimalhuacán, acompañado por expertos en hidráulica.
La responsabilidad del hecho se encuentra única y exclusivamente en el operador del Organismo descentralizado de agua potable, alcantarillado y saneamiento (ODAPAS), quien por versiones de ls propios vecinos afectados, se encontraba en estado de ebriedad y dejó que se llenara el tanque por encima del límite permitido y al no soportar el peso del agua causó el colapso del mismo.
“Desde hacía varios días, los habitantes de la zona sabían que el tanque estaba vacío toda vez que no llegaba el agua a sus casas”, dijo el dirigente.
El día del incidente, el operador del tanque no se encontraba en el lugar, pero había dejado abiertas las válvulas por si acaso le bombeaban agua; horas antes, fue visto fuera de su lugar de trabajo y en estado de ebriedad. Al momento en que los vecinos vieron que se estaba derramando el agua, el señor acudió al tanque, abrió de golpe la válvula que envía el agua a la red de distribución, lo cual debió haberlo hecho lentamente, pero al abrirla de golpe, la fuerza del agua causó la implosión: la presión del agua produjo un efecto de succión con los efectos ya conocidos.
La falta de reconocimiento del error que cometió el operador del ODAPAS, ha llevado a la presidenta municipal, Xóchitl Flores Jiménez, a proteger al responsable contratado por si gobierno, afirmando que el tanque tenía defectos de construcción, pues, le faltaban reforzamientos a pesar de que costó 18 millones de pesos, lo cual es absolutamente falso, pues el costo de dicho tanque fue de tan solo 6 millones 531 mil 592 pesos.
El tanque, con una capacidad de 500 m3, se localizaba en la colonia Vitálico Silva, en la calle 18 de marzo y su construcción fue para solucionar la necesidad de agua que sufría la población que habita la zona alta del municipio, conformada por más de mil 500 familias, las cuales se beneficiaban directamente del suministro de agua potable del tanque Adolfo López Mateos.
La obra fue autorizada el 8 de diciembre del 2017 e inició su construcción el 11 de diciembre del 2017, debía concluir el 20 de marzo del 2018. Los recursos fueron licitados públicamente con el número de expediente PM/CHIMA/DGOP/FISMDF-106/2017. El importe asignado para la obra fue de 6 millones 531 mil 592 pesos con 26 centavos. La empresa encargada para la ejecución fue Carrebo, S.A de C.V. La empresa entregó y cumplió con la garantía de vicios ocultos.
No es cierto que al tanque le faltaran “reforzamientos” como aseguró la alcaldesa, pues fue construido en su base con placas de acero inoxidable, grado alimenticio; las paredes con placas de acero de 6 y 4.7 mm de espesor, no como dice la presidenta que era de lámina galvanizada, con rebosaderos en la parte superior para permitir el desfogue del exceso de líquido. Con la supervisión de los poceros funcionó hasta diciembre del 2021 de manera correcta.
Desde marzo del 2022, los vecinos de la colonia Adolfo López Mateos y Vitálico Silva reportaron fallas en la distribución de agua, además, la falta del líquido por periodos prolongados, agravándose en los meses de junio y septiembre del 2022. En marzo del 2023 las fallas y falta de agua fueron más constantes.
Los reportes fueron realizados en febrero por el delegado de San Agustín Atlapulco; en julio y el 11 de noviembre del 2023, los vecinos solicitan a la directora del Odapas, Miriam Lira, realizara trabajos de mantenimiento en dicho tanque y reparaciones en las líneas de distribución. Una brigada de trabajadores acudió a realizar reparaciones en dos fugas, pero el tanque de agua lo dejaron otra vez sin mantenimiento.
Cada seis meses, la administración anterior daba el mantenimiento a los tanques de almacenamiento de agua potable, como consta en las minutas de trabajo elaboradas por personal del Organismo y la participación de la propia comunidad. Los tanques eran lavados y desinfectados, donde se podían detectar fallas; como grietas o fisuras que eran reparadas para evitar daños mayores.
Mario Jiménez encargado del tanque, desconocía la operación de los tanques, el señor era auxiliar de una pipa, lo tenían castigado en el tanque Adolfo López Mateos, nunca le dieron la capacitación para saber operar correctamente el funcionamiento del tanque.
Cuando empezó a derramarse el agua, no estaba en el tanque, le avisaron que el agua se estaba derramando, los vecinos que lo vieron, mencionan que estaba alcoholizado y cuando lo rescataron pedía “un trago”, solo le dieron un cigarro. Su incompetencia ocasionó los graves daños a 11 personas que resultaron heridas, la destrucción de varias viviendas y dejaron sin agua a más de 6,500 habitantes de la zona, señalaron en la conferencia.
Estas condiciones se repiten en todos los tanques, pozos de agua y cárcamos que existen en el territorio municipal, no cuentan con luz, radios de comunicación y lo más grave el personal capacitado fue despedido. Ejemplo de esta situación es el pozo Acuitlapilco que tiene nueve meses sin operar, La Palma seis meses sin dar servicio, la Planta de tratamiento de Aguas residuales que tiene aproximadamente ocho meses sin funcionar y el pozo La Ladera que fue reinagurado por la presidenta morenista, en donde anunciaron una inversión millonaria, no funciona desde el mes de septiembre, los vecinos afectados en cada zona conocen y padecen los perjuicios.
La Presidenta Municipal no acepta la incorrecta operación y funcionamiento que hubo en el tanque Adolfo López Mateos, la directora del ODAPAS Miriam Lira, tampoco aplica los protocolos de operación a los sistemas de agua potable.
Mientras que los habitantes de la zona sufren la incompetencia de la administración morenista y de nueva cuenta intentan justificar sus errores culpando a la administración anterior, cuando la administración tiene casi dos años de estar en funciones.
Los culpables de los desastres en el municipio son los propios morenistas, los funcionarios públicos que desconocen los procedimientos y la propia presidenta municipal Xóchitl Flores, así lo demuestran las miles de quejas que realiza la población por la falta de obras y los desastres que han ocurrido porque no hay mantenimiento en los servicios que ya existen.
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