Por Iván Calderón
UPAV, el nuevo rector
Y no, no fueron ni cuarenta días como se pensó para especular en quién sería el sucesor de don Guillermo Zúñiga Martínez.
El candidato para ocupar la rectoría de la UPAV ya está listo.
La junta de gobierno enterada.
En sí, la decisión al parecer ha sido tomada.
Quién todavía ocupa la Dirección de Administración y Finanzas de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz será factiblemente el nuevo rector.
Sí, leyó usted bien.
El contador público Andrés Blancas Portilla ocupará el lugar de su amigo Guillermo.
Don Andrés, quién fuera hombre de todas la confianza de Zúñiga Martínez habrá de extender su legado.
Hay que decirlo, la promoción de Blancas Portilla no obedece por sus méritos académicos, o su labor docente.
Andrés Blancas llega a la titularidad de la UPAV gracias a la estrecha y antigua relación que sostenía con el maestro Zúñiga.
De esta forma se pretende continuar con el funcionamiento de este colegio, como don Guillermo hubiera deseado.
Además de esto, Blancas Portilla recibió el espaldarazo del alcalde xalapeño Américo Zúñiga, dejando entre dicho que la UPAV no será otra cosa más que una concesión familiar o que al munícipe le dieron mano.
Pero esa será otra historia.
La UPAV en breve tendrá un nuevo rector, y con ello vendrán nuevos retos, o los mismos que aún no se han superado.
Y es que para nadie es un secreto que a pesar del gran esfuerzo del maestro Zúñiga, el todavía intento de universidad ha sido muy cuestionado.
Tomada como una idea renovadora, pero mal ejecutada en la UPAV se crearon al vapor carreras como ingeniería, trabajo Social, antropología, enfermería y hasta medicina, sin contar con campus para sus prácticas.
Esta academia supera en alumnos a la misma Universidad Veracruzana con más de 72 mil, pero también al mismo tiempo vuelve a despuntar entre las diversas escuelas de nivel superior con egresados no aceptados en el ámbito laboral.
Los graduados de la Universidad Popular generalmente son considerados como no aptos, provocando así un problema social. Lamentable.
Incluso, a pesar de no contar con instalaciones para carreras universitarias, se crearon maestrías y doctorados sin la calidad, ni los estándares educativos exigidos, llegando a los niveles de una escuela patito.
UPAV, el nuevo rector
Y no, no fueron ni cuarenta días como se pensó para especular en quién sería el sucesor de don Guillermo Zúñiga Martínez.
El candidato para ocupar la rectoría de la UPAV ya está listo.
La junta de gobierno enterada.
En sí, la decisión al parecer ha sido tomada.
Quién todavía ocupa la Dirección de Administración y Finanzas de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz será factiblemente el nuevo rector.
Sí, leyó usted bien.
El contador público Andrés Blancas Portilla ocupará el lugar de su amigo Guillermo.
Don Andrés, quién fuera hombre de todas la confianza de Zúñiga Martínez habrá de extender su legado.
Hay que decirlo, la promoción de Blancas Portilla no obedece por sus méritos académicos, o su labor docente.
Andrés Blancas llega a la titularidad de la UPAV gracias a la estrecha y antigua relación que sostenía con el maestro Zúñiga.
De esta forma se pretende continuar con el funcionamiento de este colegio, como don Guillermo hubiera deseado.
Además de esto, Blancas Portilla recibió el espaldarazo del alcalde xalapeño Américo Zúñiga, dejando entre dicho que la UPAV no será otra cosa más que una concesión familiar o que al munícipe le dieron mano.
Pero esa será otra historia.
La UPAV en breve tendrá un nuevo rector, y con ello vendrán nuevos retos, o los mismos que aún no se han superado.
Y es que para nadie es un secreto que a pesar del gran esfuerzo del maestro Zúñiga, el todavía intento de universidad ha sido muy cuestionado.
Tomada como una idea renovadora, pero mal ejecutada en la UPAV se crearon al vapor carreras como ingeniería, trabajo Social, antropología, enfermería y hasta medicina, sin contar con campus para sus prácticas.
Esta academia supera en alumnos a la misma Universidad Veracruzana con más de 72 mil, pero también al mismo tiempo vuelve a despuntar entre las diversas escuelas de nivel superior con egresados no aceptados en el ámbito laboral.
Los graduados de la Universidad Popular generalmente son considerados como no aptos, provocando así un problema social. Lamentable.
Incluso, a pesar de no contar con instalaciones para carreras universitarias, se crearon maestrías y doctorados sin la calidad, ni los estándares educativos exigidos, llegando a los niveles de una escuela patito.
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