Ciudad de México.- De las 32 entidades que tendrán elecciones este año, 15 de ellas contarán con cinco urnas, ocho más con seis urnas, siete estados con cuatro urnas y dos entidades con tres urnas.
Las casillas únicas se instalarán en 30 entidades, es decir, en esas casillas se recibirán tanto los votos para las elecciones federales como para las elecciones locales.
El reto del INE es que en las casillas en los estados que tendrán cinco y seis urnas los resultados de la elección presidencial se contabilicen y se escriban en las actas a buena hora, para que el conteo rápido arroje tendencias de resultados antes de las 12 de la noche del domingo.
Para lograrlo, el INE había modificado el Reglamento de Elecciones para agilizar el conteo, pero el Tribunal Electoral revocó la propuesta y ordenó que el procedimiento se realice tal como lo plantea la legislación electoral.
EL PROCEDIMIENTO EN LA LEY
Luego de que las casillas cierren y que se reciba el último voto de ciudadanos formados en la fila, se procede al escrutinio y cómputo de los votos, iniciando con la votación para Presidente de la República y gobernador, simultáneamente, luego para senadores y diputados locales, enseguida para diputados federales y alcaldías.
La Dirección de Organización considera que el conteo de cada urna, en promedio, tarda una hora y media.
Esto significa que si la casilla cierra a las 19:00 horas, de esa hora a las 20:30 se cuentan los votos para la Presidencia y, simultáneamente, los de gobernador, de 20:30 a 22 horas los de senadores y diputaciones locales, de 22 horas a 23:30 los de diputados federales y alcaldías, terminando alrededor de la 1 de la mañana, en el caso de estados con seis urnas.
Las actas se llenarían al final de este cómputo; el llenado de cada acta se calcula en 30 minutos, por lo que alrededor de las 2:00 se estarían enviando los paquetes electorales al centro de acopio y, el conteo rápido, con una muestra sólida, podría estar entre las 2 y las 5, según lo explicó el consejero Marco Baños, Presidente de la Comisión de Organización Electoral.
La razón de llenar las actas hasta el final de todos los cómputos es para poner en el lugar correcto las boletas que, por equivocación del elector, pudo haber introducido en urnas equivocadas.
Este escenario es el que ordena el Tribunal Electoral, al revocar las modificaciones que hizo el instituto.
Según el INE, esto impedirá que el PREP tenga resultados para correr a partir de las 20:00 horas (se calcula que a las 12 de la noche se contará sólo con 12% de avance del PREP) y el conteo rápido tendría una muestra sólida entre las 2 y 5 de la mañana del 2 de julio.
LA PROPUESTA DEL INE
Para ahorrarse cuatro horas de procedimiento y tener los resultados para realizar el conteo rápido y un buen avance del PREP, el INE modificó el reglamento para que, en primer lugar, se abrieran todas las urnas para localizar votos equivocados, ponerlos en la urna correcta e iniciar el conteo de la elección presidencial.
Al término de la misma, entre 8:30 y 9 de la noche, la modificación contemplaba que la urna para Presidente, con su acta ya levantada, pudiera llevarse en primer lugar al centro de acopio y obtener de ahí el dato para el conteo rápido (entre 21 y 22 horas).
Esto significaría que el funcionario que lleva la urna de Presidente al centro de acopio, no firma las actas de escrutinio y cómputo de senadores,
diputados y las locales.
Con este escenario, el INE contemplaba tener una muestra robusta del conteo rápido después de las 23:00 horas y poder anunciar las tendencias de resultados entre esa hora y las 24 horas.
Este procedimiento fue revocado por el Tribunal Electoral y ya no podrá utilizarse.
Según la explicación del Tribunal, se realizaría un “doble escrutinio” con una “manipulación” de las boletas que impide mantener la certeza del conteo, (al abrirlas una primera vez para sacar los votos depositados erróneamente y luego ya para contar los votos) y en adición, el funcionario que lleva la urna presidencial al centro de acopio, no podría firmar las actas de las demás elecciones, lo que viola el procedimiento establecido en la ley.
EL PLAN B
El pasado jueves, los consejeros anunciaron que el próximo 28 de febrero discutirán la alternativa de tomar los datos de la elección presidencial de la hoja de operaciones diseñada dentro de la documentación electoral, para hacer las operaciones, conteos de cada una de las urnas y luego, esos datos se transcriben tal cual al acta oficial de escrutinio y cómputo.
De esta manera, si la casilla cierra a las 19:00 horas, se contarían los votos de las urnas de Presidente y gobernador, simultáneamente, y alrededor de las 20:30 horas, en promedio, se tendrían ya los datos de la hoja de operaciones.
En ese momento, el Capacitador Asistente Electoral pasaría los resultados al centro de acopio por teléfono y la hoja se introduciría al paquete electoral para que quede constancia del dato que se dictó.
Como este procedimiento no espera a que se abran todas las urnas y se encuentren boletas depositadas de manera incorrecta, el Comité Técnico Asesor del Conteo Rápido, propondrá una muestra más grande para corregir este “detalle” que, según los expertos del comité y los consejeros, no distorsiona los números para hacer los intervalos de resultados.
De acuerdo con los consejeros este procedimiento garantiza certeza, respeta el procedimiento ordenado por el Tribunal, pero permite tener las tendencias del conteo rápido alrededor de las 23:00 horas. Este plan B podría ser impugnado ante el Tribunal Electoral, por parte de cualquier partido político, como sucedió con el primero.