Conave informó que hasta el momento no se han identificado casos en el país y no hay restricciones de viaje recomendadas.
El Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave) emitió una alerta a todas las unidades sobre la viruela del mono, de la cual, hasta la fecha, cuenta con 92 casos confirmados y 28 casos sospechosos, en 12 países, excluyendo a México.
“Hasta el momento no se han identificado casos en el país” y no hay restricciones de viaje recomendadas, informó a las unidades médicas de primer, segundo y tercer nivel de atención, así como a las Unidades de Vigilancia Epidemiológica Hospitalaria (UVEH), y miembros de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública (RNLSP).
Sin embargo, señaló, es importante considerar “caso sospechoso a toda persona, de cualquier edad, con una erupción cutánea o de mucosas, aguda inexplicable que progresa desde la cara con extensión al resto del cuerpo”, de acuerdo con las definiciones operacionales de caso sospechoso, probable y confirmado, con base en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
El período de incubación es de cinco a 21 días para un cuadro clínico, aunque la enfermedad sintomática cursa dos periodos clínicos. El prodrómico (primeros cinco días), se caracteriza por fiebre, cefalea intensa, linfadenopatía, lumbalgia, mialgias y astenia.
Esto, mientras en el periodo de erupción cutánea (entre los días uno y tres después del inicio de la fiebre), aparecen las distintas fases del exantema que, por lo general, afecta primero la cara y posteriormente se extiende al resto del cuerpo.
El sarpullido inicia con máculas y evoluciona, asincrónicamente, a pápulas, vesículas, pústulas y costras. La linfadenopatía, que inicia en la fase prodrómica, puede que ayude a diferenciarla de la varicela.
Además, se pueden detectar uno o más de los siguientes signos o síntomas, concurrentes o inmediatamente precedentes: cefalea, fiebre de inicio agudo (mayor a 38.5 grados centígrados). Así como, mialgias, lumbalgia, astenia.
Sin embargo, se exceptúa a quienes han sido diagnosticados, con bases clínicas, con alguna de las siguientes causas comunes de exantema agudo: varicela zoster, herpes zoster, herpes simple, sarampión, enfermedad por virus Zika, dengue, fiebre chikungunya, infecciones bacterianas de la piel, infección por gonococos diseminados, sífilis primaria o secundaria, chancroide, linfogranuloma venéreo, granuloma inguinal, molusco contagioso, urticaria alérgica y cualquier otra causa común de erupción macular o papular o vesicular.
Además, llamaron a dar seguimiento del vínculo epidemiológico: exposición física directa con un caso confirmado o probable en el que existió contacto con la piel, lesiones cutáneas o contacto sexual; o contacto con fómites como ropa o utensilios de uso personal. Antecedente de viaje a un país endémico de esta enfermedad.
El diagnóstico se realiza por reacción de la polimerasa en cadena (PCR), en muestras de exudado, húmedo o seco, de las lesiones cutáneas (preferentemente el líquido de las vesículas o pústulas; alternativamente, las costras).
Hasta el momento, no existe tratamiento ni vacuna específica para la enfermedad.
A partir del 13 de mayo de 2022, varios países no endémicos de la enfermedad han presentado casos de viruela símica. Hasta ahora, los casos no han referido el antecedente de viaje a áreas endémicas como Benín, Camerún, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Gabón, Ghana (identificado sólo en animales), Costa de Marfil, Liberia, Nigeria, República del Congo, Sierra Leona, y Sudán del Sur.
Esto representa un evento inusual, pues el alcance de la transmisión local aún no está claro. Además, no se ha identificado como una enfermedad de transmisión sexual.
La distribución de casos confirmados, de acuerdo con la OMS, desde el inicio del brote hasta el 21 de mayo, se han informado 92 casos confirmados y 28 casos sospechosos; y no se han notificado defunciones. Los casos se distribuyen en 12 países: Alemania, Australia, Bélgica, Canadá, Estados Unidos, España, Francia, Italia, Países Bajos, Portugal, Reino Unido y Suecia.
Con la erradicación de la viruela en 1980 y el cese de la vacunación contra la misma, se ha convertido en el Orthopoxvirus más importante. Los dos clados, el centroafricano (Cuenca del Congo) y el de África Occidental, este último ha causado cuadros más leves.
Para la vigilancia epidemiológica con el fin de identificar casos, consistirá en:
• Notificar a través del Sistema de Notificación Inmediata (Notinmed), utilizando el Formato de Estudio Epidemiológico de caso SUIVE-2.
• La unidad médica deberá notificar a la Jurisdicción Sanitaria a través del Formato de Estudio Epidemiológico de Caso SUIVE-2 para su validación y envío al área de epidemiología estatal, quien enviará la información del caso a nivel federal a través de Notinmed.
• Para los casos identificados en el resto de las unidades médicas del sector salud deberán realizar la notificación de manera simultánea al nivel inmediato superior de su institución y a la jurisdicción sanitaria.
• Para los casos identificados en unidades privadas se deberá realizar la notificación a través de la jurisdicción sanitaria correspondiente.
• Tomar las muestras biológicas de las lesiones (máculas, pápulas, vesículas, pústulas o costras) y enviarlas al Laboratorio Estatal de Salud Pública (LESP) o a un laboratorio auxiliar de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública, según corresponda.
• El diagnóstico confirmatorio se realizará en el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre).
• Seguimiento estrecho de un caso confirmado por 21 días a partir del último contacto. Se considera contacto estrecho a la exposición directa, contacto físico directo, incluido contacto sexual, o contacto con materiales contaminados como fomites.
• No se recomiendan las restricciones a viajes internacionales ni al comercio desde países donde se hayan identificado casos.
• Atención de los pacientes, hidratación; tratamiento sintomático. Control térmico. Evitar la manipulación de lesiones.
Asimismo, se contemplaron algunas recomendaciones para el personal de salud, tales como:
• Lavarse las manos con agua y jabón al terminar de revisar cada paciente.
• Reforzar el apego a las precauciones estándar, de contacto, y gotas en la atención ambulatoria y hospitalaria de los casos sospechosos, probables o confirmados.
• El personal de salud que haya atendido un caso confirmado debe permanecer atento sobre la aparición de síntomas sugerentes de viruela símica durante los 21 días posteriores.
• No es necesario que el personal médico que haya sido contacto del caso sea sometido a cuarentena. Se recomienda el aislamiento rápido de un caso sospechoso o confirmado en una habitación individual con ventilación adecuada, si no hay habitaciones individuales disponibles, permitiendo una distancia mínima de 1.5 m entre los pacientes.
• Se puede utilizar un vendaje, sábana o bata para cubrir las lesiones con el fin de minimizar el contacto.
• El equipo de protección personal (EPP) recomendado incluye guantes, bata, mascarilla médica y protección ocular.
• En caso de que se confirme un caso mediante una prueba de PCR en tiempo real (rt-PCR), por identificación mediante secuenciación, o éste sea sospechoso probable, se deberán enviar al Indre directamente o a través de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública, muestras que cumplam con definición operacional de caso sospechoso o probable.
• El aislamiento de casos debe continuar hasta que se resuelvan los síntomas.
Para la población, las autoridades emitieron también una serie de recomendaciones, como el lavado de manos de forma frecuente, con agua y jabón o solución alcohol gel; cubrir nariz y boca al estornudar o toser con etiqueta respiratoria.
En este sentido, sugirió evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos; y cuando se esté físicamente cerca de un enfermo, usar mascarilla médica, especialmente si está tosiendo o se tiene lesiones en la boca.
Lavar la ropa, toallas, utensilios para comer y sábanas que hayan estado en contacto con la persona enferma, utilizando agua tibia y detergente. Limpiar y desinfectar los espacios en los que se haya encontrado una persona enferma y evitar el contacto cercano con la misma.
Por último, llamó a evitar el contacto con las lesiones, si se deben tocar utilizar guantes y desechar de forma correcta. En caso de presentar síntomas, acudir al médico y evitar el contacto con otras personas.