El 25 de abril de 2016 el periodista Francisco Pacheco Beltrán fue asesinado afuera de su domicilio, en Taxco, Guerrero. Ahora, la FEADLE, está por desestimar el caso y darle carpetazo a la investigación.
Estado de México.- La familia del periodista asesinado denuncia, desde su exilio, que desde entonces no hay avances en las investigaciones al respecto.
Priscilla Pacheco, hija del periodista y representante legal de la familia, menciona que en marzo de este año, el Ministerio Publico le notificó vía telefónica que no había avance en las investigaciones, ya que no arrojaban evidencias suficientes para establecer como línea de investigación sus actividades periodísticas.
“Desde el inicio de las indagatorias a la familia se le negado copias de la averiguación previa, se nos ha revictimizado y el Ministerio Público fue omiso para atender nuestros llamados. Incluso no supimos nada de él por dos años, actualmente no atienden nuestras llamadas, y si nos presentamos en las instalaciones nos piden sacar una cita que nunca se concreta y las escasas veces que se ha acudido, el agente del Ministerio Público está de vacaciones o enfermo. Hoy quieren darle carpetazo a la investigación. En septiembre de 2019 se nos notificó que no darían copias del expediente con la justificación de que esto podría limitar su capacidad de investigación, cuando claramente han dejado ver que no tienen los medios ni el personal capacitado para cumplir con sus funciones”.
Este sábado se cumplen 4 años del asesinato del periodista y de un largo peregrinar para su familia, pues como ellos afirman: “en vez de avanzar, retrocedemos en la obtención de la verdad y la justicia”. De igual forma denuncian que el sistema judicial mexicano, carece de credibilidad porque se encuentra “podrido desde la raíz”.
El abandono hacia la familia no sólo ha sido por parte de la FEADLE; en enero de 2019, mediante un mensaje no oficial de WhatsApp, el asesor jurídico federal proporcionado por la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), avisó a la familia que dejaba el caso porque se estaba reestructurando la comisión y dejaría de laborar.
“Hasta el día de hoy no existe una notificación formal hacia la familia, dejándonos así en estado de indefensión, y nuevamente vulnerando nuestros derechos, tuvimos que contactar a la CEAV para conocer quién era nuestro nuevo asesor, y sobre los pendientes que quedaron ya que se nos dejó de informar sobre las acciones jurídicas con la CNDH, el Mecanismo de Protección y la FEADLE, argumentando que estaban cortos de personal, y no sabían en qué habíamos quedado, solicitando la información que debería constar en sus archivos, siendo todo esto un acto de revictimización”, señalan.
En 2017, la CNDH enlistó un “rosario de omisiones y fallas” en la recomendación 072 sobre las investigaciones del homicidio de Francisco Pacheco Beltrán, por parte del personal de la FEADLE, al incumplir con diversas diligencias relacionadas con su labor informativa como periodista.
La institución defensora de los Derechos Humanos añadió que el escenario en que ocurrió el crimen obligaba a realizar de manera especial e inmediata el acopio, revisión y análisis de la información emitida con relación a su trabajo periodístico que antecedió al hecho delictivo.
Lo anterior, para detectar si las noticias que cubría discurrían sobre temas de corrupción, narcotráfico, delincuencia organizada, seguridad pública y asuntos relacionados, como efectivamente ocurría en el caso de Francisco Pacheco.
Pese a que el diario El Foro de Taxco entregó un paquete de las últimas publicaciones de Pacheco Beltrán a elementos de la Procuraduría General de la República, precisamente
con el propósito colaborar con datos que permitieran dar con sus asesinos materiales e intelectuales, de la recomendación se desprende que no hubo tal análisis, sólo una simple lectura.
“Después de lo que pasó, ninguna autoridad ha podido ayudarnos a tener acceso a la justicia, a tener una vida digna, a cuatro años continúan tratando de omitir el trabajo periodístico en la investigación del asesinato. Tuvimos que salir de casa como si los delincuentes fuéramos nosotros. Las instituciones con las que hemos tenido contacto sólo le han dado vueltas al asunto. Con todo esto, han evitado que tengamos acceso a la verdad de lo que sucedió y a una reparación. Hemos llegado a desarrollar problemas de salud, de paranoia, estas cosas cambian tu vida y la vuelven tormentosa”, declaró la hija del periodista.
La familia ha recibió la solidaridad de reporteros guerrerenses, organizaciones internacionales en defensa de la libertad de expresión así como de familiares y amigos. De las autoridades sólo han recibido portazos y silencio.
La abogada afirma que tuvieron la esperanza de recibir justicia con el gobierno de la 4T pero fue todo lo contrario, “creíamos que con la llegada de López Obrador obtendríamos una mejor respuesta por parte de la Fiscalía y la CEAV pero ha sido todo lo contrario. Ahora buscan darle carpetazo al caso”.
Francisco Pacheco, de 49 años, fue ultimado por dos disparos de arma de fuego afuera de su domicilio en Taxco de Alarcón, Guerrero, en el convulso sur de México.
Pacheco Beltrán era el periodista más crítico de Taxco, su trabajo se centró en denunciar el abuso del poder y corrupción en la ciudad y en Guerrero.
Alí Pacheco, otro de los hijos del periodista asesinado, también es comunicador y en Toluca dirige el medio electrónico Imagina, desde el cual ejerce las enseñanzas de su padre.
El homicidio de Pacheco permanece en la impunidad.
VcVN