Estado de México.- Durante una década, el número de suicidios en la entidad ha aumentado, al pasar de un promedio de 200 a 500, lo que representa una tasa de dos a cuatro personas por cada 10 mil habitantes, comentó el director del Centro Estatal de Vigilancia Epidemiológica y Control de Enfermedades (CEVECE), Víctor Manuel Torres Meza.
El funcionario de la Secretaría de Salud en la entidad destacó que en ese proceso, la curva de edad ha cambiado, pues antes eran personas de la tercera edad y ahora son jóvenes de 15 a 29 años.
Detalló que los hombres son quienes consuman quitarse la vida, ya que la estadística es cinco por una mujer, en donde la forma más común es el ahorcamiento en casa, regularmente cuando éstos se encuentran solos en la vivienda.
De acuerdo con estudios, explicó, una constante que se ha apreciado en ese tipo de suicidios es que el joven "una mañana se colgó de la regadera con el cordel de la cortina de baño o con su cinturón, a veces suelen dejar una carta póstuma".
Otro de los rasgos característicos de esa problemática, agregó, es que quitarse la vida, la mayor prevalencia se encuentra en las ciudades más pobladas y los meses de más incidencia son marzo y abril.
Insistió en que el perfil del suicida ha cambiado de 10 años a la fecha, pues pasó del viejito que solía hacerlo en temporada invernal, por causa de la tristeza, a jóvenes de los 15 a 29 años.
Actualmente, manifestó, la tendencia es durante los meses de marzo a abril debido a que no se ha encontrado trabajo, no se pasó el examen de la universidad, también puede ser por sufrir problemas sentimentales, al ejemplificar con la ruptura de relaciones amorosas.
Ese problema, indicó, ha crecido porque no se ha sabido manejar el duelo o la pérdida de manera profesional, además que los familiares muchas veces no se dan cuenta de las señales de alerta que emiten los jóvenes y adolescentes.
El funcionario de la Secretaría de Salud en la entidad destacó que en ese proceso, la curva de edad ha cambiado, pues antes eran personas de la tercera edad y ahora son jóvenes de 15 a 29 años.
Detalló que los hombres son quienes consuman quitarse la vida, ya que la estadística es cinco por una mujer, en donde la forma más común es el ahorcamiento en casa, regularmente cuando éstos se encuentran solos en la vivienda.
De acuerdo con estudios, explicó, una constante que se ha apreciado en ese tipo de suicidios es que el joven "una mañana se colgó de la regadera con el cordel de la cortina de baño o con su cinturón, a veces suelen dejar una carta póstuma".
Otro de los rasgos característicos de esa problemática, agregó, es que quitarse la vida, la mayor prevalencia se encuentra en las ciudades más pobladas y los meses de más incidencia son marzo y abril.
Insistió en que el perfil del suicida ha cambiado de 10 años a la fecha, pues pasó del viejito que solía hacerlo en temporada invernal, por causa de la tristeza, a jóvenes de los 15 a 29 años.
Actualmente, manifestó, la tendencia es durante los meses de marzo a abril debido a que no se ha encontrado trabajo, no se pasó el examen de la universidad, también puede ser por sufrir problemas sentimentales, al ejemplificar con la ruptura de relaciones amorosas.
Ese problema, indicó, ha crecido porque no se ha sabido manejar el duelo o la pérdida de manera profesional, además que los familiares muchas veces no se dan cuenta de las señales de alerta que emiten los jóvenes y adolescentes.
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