Toluca, Méx.- Más de 70 mil mexiquenses se han quedado sin fuente de empleo por el cierre de más de mil 700 negocios, en su mayoría bares, denunciaron dueños y trabajadores de los llamados "giros negros", los cuales se manifestaron este lunes ante el Palacio de Gobierno, en Toluca, en demanda de la reapertura de sus establecimientos.
Roberto Gutiérrez, a nombre de los propietarios de esos bares, cantinas y tables dances, dijo que "lo que hace el gobierno estatal no es en contra de la trata de personas sino a favor del desempleo".
Rita Hernández, quien era bailarina en un negocio que operaba en el Paseo Tollocan, en Toluca, indicó que más del 80 por ciento de los afectados por la decisión gubernamental de cerrar los denominados antros son mujeres, "muchas de ellas madres solteras que hoy no tienen cómo dar de comer a sus hijos".
Al cerrar la circulación vehicular en la avenida Lerdo de Tejada, una de las más importantes del Centro Histórico de Toluca, los dueños y ex empleados de esos establecimientos se dijeron "desesperados" porque "el gobierno nos está empujando a la delincuencia".
Roberto Gutiérrez, propietario de bares en Ecatepec, señaló que la mayoría del personal que ahí laboraba no cuenta con ninguna preparación académica, lo que los hace vulnerables al desempleo que ahora enfrentan y ´podrían dedicarse a cualquier actividad ilícita.
"El gobierno dice que está luchando contra la delincuencia, para bajar los delitos, pero echa a la calle a más de 70 mil personas que no tienen forma de encontrar otro trabajo, quienes tarde o temprano acabarán en las filas de los grupos delictivos.
Los inconformes exigieron al gobierno estatal delinear perfectamente las normas de operación de bares, cantinas y todos los negocios donde se venden bebidas alcohólicas y se ofrecen espectáculos para adultos, para que exista un seguimiento puntual, se evite cualquier tipo de delito, pero no se deje sin la oportunidad de empleo a tantas personas.
Roberto Gutiérrez, a nombre de los propietarios de esos bares, cantinas y tables dances, dijo que "lo que hace el gobierno estatal no es en contra de la trata de personas sino a favor del desempleo".
Rita Hernández, quien era bailarina en un negocio que operaba en el Paseo Tollocan, en Toluca, indicó que más del 80 por ciento de los afectados por la decisión gubernamental de cerrar los denominados antros son mujeres, "muchas de ellas madres solteras que hoy no tienen cómo dar de comer a sus hijos".
Al cerrar la circulación vehicular en la avenida Lerdo de Tejada, una de las más importantes del Centro Histórico de Toluca, los dueños y ex empleados de esos establecimientos se dijeron "desesperados" porque "el gobierno nos está empujando a la delincuencia".
Roberto Gutiérrez, propietario de bares en Ecatepec, señaló que la mayoría del personal que ahí laboraba no cuenta con ninguna preparación académica, lo que los hace vulnerables al desempleo que ahora enfrentan y ´podrían dedicarse a cualquier actividad ilícita.
"El gobierno dice que está luchando contra la delincuencia, para bajar los delitos, pero echa a la calle a más de 70 mil personas que no tienen forma de encontrar otro trabajo, quienes tarde o temprano acabarán en las filas de los grupos delictivos.
Los inconformes exigieron al gobierno estatal delinear perfectamente las normas de operación de bares, cantinas y todos los negocios donde se venden bebidas alcohólicas y se ofrecen espectáculos para adultos, para que exista un seguimiento puntual, se evite cualquier tipo de delito, pero no se deje sin la oportunidad de empleo a tantas personas.
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