Toluca, México.- El consumo de refrescos no ha disminuido a pesar de que su precio se incrementó por el nuevo impuesto que grava los productos con alto contenido de calorías.
Antonio Mercado Herrera, secretario de Planeación y Promoción Sindical del Sindicato de Embotelladores, indicó que a principios de año por el descontrol y confusión sí se presentó un decremento de las ventas de alrededor de 10 por ciento; sin embargo ahora la demanda ha alcanzado ya por lo menos los niveles del año pasado.En un principio con el gravamen de un peso por litro de refresco producido sí nos afectó, fue el descontrol y la confusión, pero poco a poco y con el trabajo de las áreas de ventas de las empresas se ha logrado restablecer a comparación con el año pasado
También se están recuperando las pocas plazas que se habían perdido, pues el mejor vendedor es el calor, apuntó el dirigente sindical.
Señaló que incluso por la demanda mayor por el clima caluroso en algunas empresas los trabajadores están trabajando tiempo extra.
Recordó que a nivel nacional se estima en 12 mil 500 millones de litros el consumo de refrescos y es lo que retiene en pesos el gobierno federal por impuestos al año.
Explicó que un punto que sí ha afectado a las refresqueras contenido en la reforma hacendaria, es la reducción en la deducibilidad de las prestaciones que se dan a los trabajadores. Al final el empresario no es el que paga el gravamen, sino el que paga los platos rotos siempre es el trabajador, mencionó y destacó que ésta empresa emplea a 98 mil personas en el país, de ellos unos 8 mil en el Estado de México.
Antonio Mercado Herrera, secretario de Planeación y Promoción Sindical del Sindicato de Embotelladores, indicó que a principios de año por el descontrol y confusión sí se presentó un decremento de las ventas de alrededor de 10 por ciento; sin embargo ahora la demanda ha alcanzado ya por lo menos los niveles del año pasado.En un principio con el gravamen de un peso por litro de refresco producido sí nos afectó, fue el descontrol y la confusión, pero poco a poco y con el trabajo de las áreas de ventas de las empresas se ha logrado restablecer a comparación con el año pasado
También se están recuperando las pocas plazas que se habían perdido, pues el mejor vendedor es el calor, apuntó el dirigente sindical.
Señaló que incluso por la demanda mayor por el clima caluroso en algunas empresas los trabajadores están trabajando tiempo extra.
Recordó que a nivel nacional se estima en 12 mil 500 millones de litros el consumo de refrescos y es lo que retiene en pesos el gobierno federal por impuestos al año.
Explicó que un punto que sí ha afectado a las refresqueras contenido en la reforma hacendaria, es la reducción en la deducibilidad de las prestaciones que se dan a los trabajadores. Al final el empresario no es el que paga el gravamen, sino el que paga los platos rotos siempre es el trabajador, mencionó y destacó que ésta empresa emplea a 98 mil personas en el país, de ellos unos 8 mil en el Estado de México.
El Sol de Toluca
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