José Luis Téllezgirón
•La nueva Ley electoral, coarta la libertad de expresión en el Estado de México.
•El 84 por ciento de la población no conoce a sus candidatos ni sus propuestas a 22 días de iniciadas las campañas proselitistas
•El IEEM como el muñeco Pin-Pon, se lava su carita con agua y con jabón.
Pues ya están en marcha las “prodigiosas reformas” del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) para las votaciones del siete de junio; y las puso en marcha una vez más sin tomar en cuenta a la opinión pública; a las masas populares mexiquenses y ni siquiera a los medios de información; olvidando el principio de puente de comunicación masiva que ejercen _los medios_ con la sociedad mexiquense y olvidando que -según el gobernador Eruviel Ávila Villegas, lo dice en cada reunión de fin de año-, La Prensa es la piedra angular de todo estado y nación que se dice vive en plena democracia.
Sin duda el IEEM, anticipadamente se cura en salud, temeroso de su actuar y anticipadamente sentirse derrotado por el abstencionismo y apatía social que se avizora durante las votaciones del próximo siete de junio; Porque este fenómeno del abstencionismo se registra también en los comités de los diversos partidos, por los polítologos, los especialistas, la clase política y los comunicadores; en las reuniones de café, los pasillos de Palacio de Gobierno e incluso los informes que aún le llegan cotidianamente al Gobernador Eruviel o al secretario de gobierno José Manzur Quiroga.
Ahora el IEEM, se asemeja al muñeco Pin-pon, desde hoy se lava su carita con agua y con jabón, se maquilla y protectoramente se cobija del brazo del unilateral lineamiento para el monitoreo a medios de comunicación electrónicos, impresos, Internet, alternos y cine para el proceso electoral 2014-2015, en otras palabras, puso en marcha la Ley Mordaza a los comunicadores; quienes por el solo hecho de informar a la sociedad de acciones, actividades, e información escrita y gráfica de los candidatos, ya se convierten en transgresores de esta nueva ley y hasta pueden ser considerados –los comunicadores- como delincuentes electorales, por el simple hecho de ejercer su derecho constitucional referente a la libertad de expresión.
Basado en el Artículo 266 del Código Electoral del Estado de México, que especifica “…El Instituto (IEEM) realizará monitoreos de medios de comunicación electrónicos e impresos, públicos y privados, durante el periodo de precampaña y campaña electoral, o antes, si así lo solicita un partido político. Los monitoreos tendrán como fin garantizar la equidad en la difusión de los actos proselitistas de los partidos, coaliciones y candidatos.
El monitoreo de medios servirá para apoyar la fiscalización de los partidos políticos y para prevenir que se rebasen los topes de campaña. El Instituto podrá auxiliarse de empresas externas para realizar dicho monitoreo. El instituto realizará monitoreos de la propaganda de los partidos políticos colocada en todo tipo de espacios o equipamiento utilizado para difundir mensajes. El resultado de los monitoreos se hará público en los términos que determine el Consejo General…..” Pin pon, a través de la Comisión de Acceso a Medios Propaganda y Difusión, de inmediato crea este lineamiento el cual consta de 9 cuartillas, 27 artículos y siete títulos alusivos a las “prohibiciones” registradas durante el monitoreo a medios de comunicación electrónicos, impresos, internet, alternos y cine.
A Pin-Pon se le olvidó que este monitoreo de seguimiento especializado cuantitativo y cualitativo, agrede la inteligencia de la sociedad en su conjunto; pues a 22 días del arranque de campaña proselitista, el 84 por ciento de la población mexiquense, desconoce la oferta y propuesta de los candidatos que aspiran a representar a esa misma sociedad.
Y no obstante la inconformidad que algunos representantes de la prensa pudiesen tener con Pin-Pon, en lo referente a esta Ley Mordaza, la mejor opinión es la que usted amable lector puede generar desde la comodidad de su hogar.
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