Ciudad de México.- El Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) informó a la Cámara de Diputados que la partida presupuestaria de la institución es insuficiente para generar nuevos centros de atención para este sector de la población.
Afirmó que el Inapam requiere que se le faculte para no sólo dar recomendaciones a los centros existentes, sino obligarlos o sancionarlos, cuando no den atención y servicios de calidad a los adultos mayores.
Sostuvo que el envejecimiento poblacional es un desafío para las políticas de salud, seguridad social y asistencial, y constituye uno de los principales problemas del siglo, ya que el porcentaje de este sector se duplicará hasta representar más de la quinta parte de la población mundial para 2050.
Así respondió el Inapam a dos dictámenes con punto de acuerdo, aprobados por la Cámara de Diputados, relativos a mantener el respeto a las personas adultas mayores y crear nuevas casas hogar, albergues y Residencias de Día, públicos y de carácter gratuito para esta población.
Los diputados expusieron que datos de la Encuesta sobre Maltrato a Personas Adultas Mayores precisan que el 16 por ciento de esta población, es decir, más de 1.5 millones, sufre maltrato o abuso, siendo las mujeres las que más lo padecen.
Destacaron que, de acuerdo con el Inegi, en 2013 había 723 asilos y otras residencias para el cuidado de ancianos, sin distinguir si eran públicos o privados, lo que es insuficiente. Además, existen albergues o casas hogar que trabajan fuera de la ley y sin vigilancia alguna.
En el documento, publicado en la Gaceta Parlamentaria y remitido a la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, el Inapam aseguró que se requiere potenciar la contribución del grupo de personas mayores al desarrollo social y prevenir que se convierta en un factor de crisis para los gobiernos, la sociedad y las familias.
Mencionó que la discriminación por razones de edad es un tema emergente, sobre todo si se tiene en cuenta que la población de 60 años y más se está convirtiendo en el grupo de más rápido crecimiento en México, y que la esperanza de vida de las mujeres es más elevada.
Expresó que la supervisión de los centros de atención se realiza bajo la Norma Oficial Mexicana NOM-031-SSA3-2012 -Asistencia social. Prestación de servicios de asistencia social a adultos y adultos mayores en situación de riesgo y vulnerabilidad-, y se han elaborado cuatro instrumentos de medición que evalúan la calidad de servicios y trato. Precisó que es fundamental promover políticas públicas que garanticen que todas las personas mayores puedan envejecer con seguridad y dignidad en lugares como las Residencias de Día, cuyo objetivo es dar atención integral a los hombres y mujeres de esta edad, mantener su autonomía y funcionalidad, otorgarles alimentos balanceados y dar reactivación física, entre otras acciones.
Afirmó que el Inapam requiere que se le faculte para no sólo dar recomendaciones a los centros existentes, sino obligarlos o sancionarlos, cuando no den atención y servicios de calidad a los adultos mayores.
Sostuvo que el envejecimiento poblacional es un desafío para las políticas de salud, seguridad social y asistencial, y constituye uno de los principales problemas del siglo, ya que el porcentaje de este sector se duplicará hasta representar más de la quinta parte de la población mundial para 2050.
Así respondió el Inapam a dos dictámenes con punto de acuerdo, aprobados por la Cámara de Diputados, relativos a mantener el respeto a las personas adultas mayores y crear nuevas casas hogar, albergues y Residencias de Día, públicos y de carácter gratuito para esta población.
Los diputados expusieron que datos de la Encuesta sobre Maltrato a Personas Adultas Mayores precisan que el 16 por ciento de esta población, es decir, más de 1.5 millones, sufre maltrato o abuso, siendo las mujeres las que más lo padecen.
Destacaron que, de acuerdo con el Inegi, en 2013 había 723 asilos y otras residencias para el cuidado de ancianos, sin distinguir si eran públicos o privados, lo que es insuficiente. Además, existen albergues o casas hogar que trabajan fuera de la ley y sin vigilancia alguna.
En el documento, publicado en la Gaceta Parlamentaria y remitido a la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, el Inapam aseguró que se requiere potenciar la contribución del grupo de personas mayores al desarrollo social y prevenir que se convierta en un factor de crisis para los gobiernos, la sociedad y las familias.
Mencionó que la discriminación por razones de edad es un tema emergente, sobre todo si se tiene en cuenta que la población de 60 años y más se está convirtiendo en el grupo de más rápido crecimiento en México, y que la esperanza de vida de las mujeres es más elevada.
Expresó que la supervisión de los centros de atención se realiza bajo la Norma Oficial Mexicana NOM-031-SSA3-2012 -Asistencia social. Prestación de servicios de asistencia social a adultos y adultos mayores en situación de riesgo y vulnerabilidad-, y se han elaborado cuatro instrumentos de medición que evalúan la calidad de servicios y trato. Precisó que es fundamental promover políticas públicas que garanticen que todas las personas mayores puedan envejecer con seguridad y dignidad en lugares como las Residencias de Día, cuyo objetivo es dar atención integral a los hombres y mujeres de esta edad, mantener su autonomía y funcionalidad, otorgarles alimentos balanceados y dar reactivación física, entre otras acciones.
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